La Reforma Energética resultó ser un fracaso, pues solo ha servido para el despido de miles de trabajadores de Petróleos Mexicanos, sostuvo el diputado Joaquín Hernández Correa (PAN).
El exsecretario general de la Sección 1 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, sostuvo que no han sido los empleados de PEMEX los beneficiarios de la reforma, sino empresas trasnacionales a quienes se les han regalado el petróleo.
Sostuvo que la reforma energética en la empresa paraestatal fue implementada sin calcular las consecuencias que es el despido de miles de trabajadores.
En ese sentido, el hijo de Joaquín Hernández Galicia sostuvo que por cada trabajador despedido de PEMEX, cinco familias son afectadas.
Además de los despidos cientos miles de trabajadores han sido obligados a jubilarse y las plazas canceladas.
En ese sentido, aseveró que la empresa ha violado el contrato colectivo de trabajo, al no respetar el derecho del trabajador que se jubila a dejar su plaza a un hijo o un familiar.
Al respecto, mencionó que de la refinería de Madero el año pasado fueron jubilados 300 obreros y en el curso del presente año van ya otros tantos, quienes han sido jubilados contra su voluntad.
Sostuvo que estas y otras muchas irregularidades han sido posibles gracias a la complicidad del dirigente sindical de los petroleros, Carlos Romero Deschamps, quien no defiende a los trabajadores.
Mientras que un trabajador petrolero gana un promedio de 14 mil pesos, hay funcionarios y empleados de confianza cuyos sueldos son de 50 mil pesos y más.
«Mientras los despedidos andan de albañiles, plomeros, pintores, carpinteros, mecánicos, electricistas, comerciantes ambulantes o venden ropa usada».
