El tiroteo en la clínica para discapacitados dejó 16 muertos y 18 heridos; uno de los agresores, árabe musulmán.
LOS ÁNGELES.
Un tiroteo en el Centro Regional de Inland de San Bernardino, una instalación privada de servicios de salud para personas con discapacidad, dejó ayer un saldo de 16 muertos y 18 heridos.
De acuerdo con autoridades locales y federales, dos de los tres presuntos atacantes murieron en un enfrentamiento con la policía y un tercer sospechoso resultó herido y está bajo arresto.
Uno de los presuntos agresores fue identificado como Sayd Farook, estadunidense de origen árabe descrito como un devoto musulmán.
Poco después de las 11 horas locales, cuando inició el ataque armado, el Departamento de Bomberos de San Bernardino, ubicado a 96 kilómetros de Los Ángeles, informó que envió paramédicos para atender a unas 20 personas lesionadas.
Cerca de las 12:30 horas llegaron al lugar de los hechos agentes de la Administración para el control de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF, por sus siglas en inglés), de la Oficina de Investigaciones Federales (FBI) y de una Agencia Antiterrorista de Los Ángeles.
Para entonces, la policía llevaba a cabo el tercer desalojo del centro y mencionó, todavía extraoficialmente, que las autoridades federales detonarían un explosivo en el perímetro de esas instalaciones.
A distancia era posible obtener información desde el lugar de los hechos por usuarios de redes sociales, como la cobertura en Periscope que realizó una joven residente de San Bernardino, Nereida Moreno, desde la banqueta frente a la entrada principal del centro donde ocurrió el ataque.
A las 15 horas, el jefe de bomberos, Tom Hannemann, dijo que tres personas estaban en estado grave. La policía informó que diez de los heridos estaban hospitalizados en condición crítica.
LA POLICÍA MATA A
DOS SOSPECHOSOS
Por la noche, el jefe de la policía de San Bernardino, Jarrod Burguan, informó que dos de los sospechosos del ataque murieron en un operativo.
Se trata de un hombre y de una mujer. Iban vestidos con ropa de asalto y llevaban rifles y pistolas”, explicó Burguan en una rueda de prensa.
El jefe policial no dio a conocer mayores detalles sobre la identidad o motivos de los atacantes, que habrían fallecido tras una persecución a una camioneta oscura ocurrida a las 15:30 horas locales.
Televisoras de la ciudad mostraron a esa hora a vehículos blindados de la policía rodeando la camioneta con las ventanillas destrozadas por balazos en una calle residencial.
En el operativo resultó herido uno de los agentes, que fue trasladado a un hospital cercano aunque su vida no corre peligro.
Una tercera persona fue detenida tras ser vista salir del lugar del tiroteo, pero la policía no pudo confirmar si participó en el ataque.
El auditorio acogía un evento organizado por el condado de San Bernardino para un centenar de trabajadores.
El diario Los Angeles Times informó que un agente federal, cuyo nombre omitió, dijo que investigadores creen que uno de los atacantes salió del evento tras una discusión y regresó acompañado de uno o dos atacantes más.
Un empleado del centro, Brandon Hunt, contó a la cadena CNN que al momento del ataque había unos 550 trabajadores en el centro.
VEN POR MEXICANOS
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México informó ayer que su Consulado en San Bernardino, California, daba seguimiento a los lamentables hechos para verificar si hay nacionales mexicanos afectados.
La dependencia federal dijo que, hasta ayer, el Departamento del Alguacil del condado no había reportado a personas de origen mexicanos entre las víctimas.(Con información de AP, AFP