Luego de una visita de seis días el Papa terminó sus actividades en ciudad Juárez, donde fue despedido por Enrique Peña Nieto.
Agencias.
Ciudad Juárez.- El Papa Francisco abordó el avión que lo llevará de regreso a Roma, luego del último día de actividades que tuvo en Ciudad Juárez, tras una visita oficial de seis días a México.
Con el tema de «Las Golondrinas» de fondo, un grupo de baile folklórico y decenas de personas agitando sus pañuelos en señal de despedida, Francisco abordó la aeronave de Aeroméxico, con la leyenda «Misionero de Paz», justo a las 20:13 horas, para despegar minutos después, a las 20:39 horas.
Acompañado del presidente Enrique Peña Nieto y su esposa Angélica Rivera, a la despedida del Pontífice acudieron también miembros del gabinete, tal como el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, la procuradora General de la República, Arely Gómez, la canciller Claudia Ruiz Massieu, el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, así como representantes del Estado Mayor Presidencial.
A su paso por la alfombra que lo llevaría al avión de vuelta al Vaticano, varios niños se acercaron para abrazarlo, algunos con pancartas de despedida.
Minutos antes del despegue, el Pontífice escribió un mensaje en su cuenta oficial de Twitter: Me he sentido acogido, recibido por el cariño, la esperanza de esta gran familia mexicana, gracias por abrirme las puertas de su vida.
“¡No más muerte ni explotación!”
“¡No más muerte ni explotación!”, clamó el Papa Francisco en una misa que celebró en la frontera de México y Estados Unidos, donde denunció las “terribles injusticias” que sufren los migrantes en su intento por llegar “al otro lado”.
“Esclavizados, secuestrados, extorsionados, muchos hermanos nuestros son fruto del negocio del tránsito humano”, dijo el Papa al hablar ante miles de personas congregadas en la explanada El Chamizal, a escasos metros de la alambrada que separa Chihuahua de Texas.
En la parte estadunidense un grupo de fieles pudo seguir la celebración y antes de ingresar en el estadio de futbol local, donde se montó el altar, pasó con el papamóvil por “el punto”, el espacio más cercano al sector fronterizo, se bajó del vehículo y envió una bendición a través de la malla metálica.
“¡No más muerte ni explotación! Siempre hay tiempo de cambiar, siempre hay una salida y una oportunidad, siempre hay tiempo de implorar la misericordia del padre”, apuntó.
“¡Y que decir de tantas mujeres, a quienes se les ha arrebatado injustamente la vida!”, continuó, haciendo referencia a las “Muertas de Juárez”.