Reconoce la Conafor que la temporada de siniestros comenzó ‘muy caliente’; siguen activos siniestros en Jaumave y en ejidos de Victoria.
Esta temporada de siniestros forestales en Tamaulipas es intensa, reportándose seis incendios, afectando una superficie de más de 350 hectáreas y no existen pronósticos de precipitaciones pluviales.
Abelardo Saldívar Fitzmaurice, delegado de la Comisión Nacional Forestal, informó que actualmente se combaten dos incendios, uno en el municipio de Jaumave y otro en los ejidos “Vicente Guerrero” y ¨Santa Ana” de Victoria.
Debido a los fuertes vientos y lo seco de la hojarasca y los arbustos, el fuego ha crecido de forma rápida y hasta ahora no han podido ser controlados y sofocados.
En terrenos de los ejidos “Vicente Guerrero” y “Santa Ana”, desde hace una semana se registra un incendio en la Sierra Madre Oriental, alcanzando ya una superficie de más de 150 hectáreas y que por las noches es visible desde esta ciudad capital.
Otro siniestro se presenta en el rancho San Lucas, municipio de Jaumave en más de ocho hectáreas. Aunque éste se encuentra contenido dentro de un cañón, hay preocupación, ya que se está próximo a la biósfera de El Cielo.
Fitzmaurice insistió en que ambos incendios no han alcanzado por ahora zonas boscosas, pero sí existe el riesgo debido a su proximidad.
En el combate a los siniestros forestales participan dos helicópteros, brigadas de CONAFOR, SEDENA y voluntarios, pero los vientos y lo seco de la flora han impedido el poder extinguirlos.
No hay riesgo en Victoria…
El presidete municipal, Fernando Méndez Cantú, indicó que el incendio presentado en el Ejido Altas Cumbres de Ciudad Victoria, se encuentra controlado, aunque el daño hasta el último recuento ha sido de 170 hectáreas.
Pese a esto, descartó que exista riesgo para los habitantes de dicho sector, pues señaló que se tiene ya un control de parte de las autoridades correspondientes para garantizar la seguridad de todos los pobladores.
“En un polígono de 170 hectáreas, que los daños no son mayores en la alpineda, que precisamente es un bosque de encino y pino, lo que se ha estado quemando es la hojarasca, los árboles tienen buena humedad y eso ha evitado que se prendan, parece que dejó de ventear y eso ayuda mucho”, comentó.
