La elegancia, cadencia, ritmo y pasión que emana el danzón, provocó que la explanada de la Casa del Arte se convirtiera en una majestuosa pista de baile.
La diversión es cosa para todos y hay para todos los gustos y edades, y es así como los integrantes del Club de Danzón Juárez de Matamoros, A.C. hace gala de sus mejores pasos cada tarde en las plazas públicas de esta ciudad fronteriza.
El Club de Danzón Juárez de Matamoros, presentó un espectáculo de baile durante la clausura del festival con motivo del Día Internacional de la Danza, organizado por la Casa del Arte de Ciudad Victoria.
La elegancia, cadencia, ritmo y pasión emana el danzón, provocó que la explanada de la Casa del Arte se convirtiera en una pista de baile en que el ingrediente principal fue la alegría de la gente.
Este club de baile originario de Matamoros, es un grupo de entusiastas del danzón que se dedican a bailar este bello ritmo que es bien llamado el rey de los bailes finos de salón.
Jesús Valerio Reynúa, presidente del club de danzón, dijo que este 2016 se cumplen nueve años de practicar este baile tradicional que nació en Cuba, pero que se bailó por primera vez en el Estado de Yucatán.
Contó que al principio ninguno de los integrantes sabían bien los pasos correctos del danzón, pero fue a través de dos maestros de baile originarios de Guadalajara que aprendieron a dominar el estilo.
“Nosotros teníamos tiempo apoyando en la plaza de Matamoros bailando danzón, pero lo bailábamos al principio como vals, pero yo tenía unos amigos profesores de baile que vinieron en esa ocasión desde Guadalajara y platicando con ellos se ofrecieron a enseñarnos lo básico y ya de ahí comenzamos a ser un club”.
El grupo está integrado por adultos de diferentes edades, la mayoría personas retiradas de sus tareas laborales, quienes buscan ocupar su tiempo libre en actividades, entablar amistades y salir de la rutina diaria. Reynúa destacó que dentro del club se han formado parejas que hasta la fecha llevan una relación sólida.
“Aquí hay alrededor de 30 compañeros, algunos son jubilados, hay matrimonios, otros son viudos, se hacen novios aquí y se casan. El danzón nos llamó la atención porque es un baile muy fino, elegante y no cualquiera lo baila”.
Comentó que el baile les ha inyectado vitalidad y los hace menos propensos a desarrollar enfermedades provocadas por la inactividad y el estrés.
“El danzón es buenísimo para la salud, sirve para los triglicéridos, el colesterol y el azúcar y mucha gente a la edad de nosotros creen que se les está acabando el mundo y eso no es cierto, es cuando apenas comienzas a vivir, conociendo este baile como que revives”.
El Club de Danzón Juárez de Matamoros, ha participado en festivales de distintas ciudades como Reynosa, Monterrey, Brownsville, Texas, en iglesias y escuelas por mencionar algunos ejemplos.
Se enamoraron bailando danzón
Hace ocho años Gabino Robledo y María Luisa González se conocieron cuando tomaban clases de danzón, ambos llevaban tiempo de haber enviudado, así que el flechazo fue inmediato. Su elegancia al bailar conquistó el corazón de Gabino, la cercanía los unió y hoy siguen disfrutando de este maravilloso baile como esposos.
“Cierta ocasión llegué a la plaza de Matamoros para bailar danzón, entonces ahí la vi a ella y le pregunté ¿gusta usted bailar conmigo?, y me dijo que sí y yo le dije; hasta que se me hizo bailar con usted. Bailamos y le dije ¡Ah, que lindo baila usted! ¡Vamos a conocernos! y después de un año de amistad nos casamos por el civil”, relató Gabino.
La pareja lleva seis años de feliz matrimonio, bailan juntos en los festivales, ella con un vestido rojo debajo de las rodillas y en su mano lleva un abanico, él con guayabera, pantalón y zapatos en color blanco que es el atuendo tradicional de los integrantes del club.
“Cuando uno está solo sufre mucho, entonces nos juntamos y tuvimos una boda muy bonita, desde entonces todo ha sido bien bonito para los dos, porque participamos como pareja de baile en todos los eventos”, finalizó.