Eso significa que. . .

5037
Tiempo aproximado de lectura: 3 minutos

Hay una frase que me cautiva: “[HOY… Cancela el instinto natural de ir a favor de lo negativo”.

El ser humano tiene una tendencia natural a visualizar problemas, de tender puentes imaginarios que nunca habrá de cruzar, porque no ha aprendido a controlar su mente, y a dominar sus emociones, desconoce dos cosas 1.- Que eres lo que piensas; y 2.- Que tu vibrato original es positivo, se finca en el amor y el equilibrio.

Este viejo Filósofo se pregunta: ¿De qué manera se pueden atacar los miedos y eliminar la tendencia a lo negativo?, muy sencillo, en el momento del día en el que lleguen las emociones, sentimientos, pensamientos negativos, preocupaciones, miedos, ansiedades, temores, pesimismo, incertidumbre y fantasías negativas, puedes recuperar el equilibrio, la armonía y la paz de tu mente, al abrir tu corazón al amor.

En un corazón insensible, frío, ausente de calidez humana, es fácil que accesen los pensamientos negativos, improductivos y dañinos que al romper tu armonía con el universo, sólo sirven para frenar tu evolución espiritual y crecimiento físico.

Cuando reconoces que HOY formas parte del milagro de la vida, te alejas de lo negativo; tu corazón lleno de tu íntima calidez se abre, siembras semillas y paz por el camino; cierras el acceso al miedo, a las emociones, sentimientos y pensamientos negativos; haces tu tarea con tal pasión, entusiasmo y con amor, que haces de tu día una obra maestra.

Cuando el miedo te frene, cuando las dudas te acompañen, cuando las preocupaciones te debiliten, cuando el dolor del pasado te atrape, ensimísmate en ‘tu mágica mismidad’ y ponlas en manos del Señor, son más grandes, Él las acomodará en el lugar exacto del rompecabezas de la vida.

Cuando te invada la incertidumbre, haya duda de qué camino debes tomar, has un compás de espera, medita, sigue tu intuición y elige el camino que te dice ‘la voz del corazón’. “Quien elige el camino del corazón no se equivoca nunca, porque el corazón tiene razones… Que la humana razón desconoce”.

Cuando te das permiso de hacer a un lado la tendencia de vibrar con lo negativo, de enfrentar los miedos y temores que vienen de la mano del enorme misterio de la vida y de la muerte, cuando confías que HOY DIOS tiene un plan maravilloso para ti, que el universo entero conspira a tu favor, para que seas feliz, triunfes y trasciendas, te conectas con tu Maestro Interior, que tiene la magia de vincularte amorosamente con la fuente de la vida.

Una cosa debe quedarte bien clara, no existe trabajo, amigos, matrimonio, ni relaciones perfectas, las hay saludables, saludables significa no a la ausencia de problemas, ni de diferencias, sino que tengas la inteligencia y la habilidad de saber manejarlos adecuadamente, vibrando con lo positivo que hay en el poder del amor.

Cuando te das permiso de accesar a la magia del amor, te es revelada una frase: “DIOS NO PATROCINA FRACASOS”, recuerda que el universo entero conspira a tu favor, no contra ti, ‘tiras los miedos afuera’ y al viajar ligero de equipaje, te encuentras con el gigante que habita en tu interior.

La conexión con la Divinidad, inicia cuando por la mañana te ves al espejo, agradeces estar vivo un día más y te amas, porque nadie puede dar lo que no tiene, cuando fluyes con amor, cancelas cualquier pensamiento, sentimiento y emoción que te lleve a lo negativo, entonces eres capaz vivir, enseñar, aprender, corregir, trabajar, luchar y dar con amor, tu alma se prepara para recibir algo mejor.

Cuando permites que el amor sea una buena nueva, una constante en tu día, percibes que su poder te armoniza, te conecta contigo mismo, cambia los problemas en soluciones, hace que lo que parecía imposible, se realice, te salva de los infortunios, te aleja del dolor, entonces vives en una regocijante paz interior que llega con la felicidad y la alegría.

En la vida del viejo Filósofo, el amor y el humor, son el alfa y el omega y aprendiendo del genio del mexicano le cuento que: “Resulta que “el Filósofo caminaba tranquilamente por la plaza, cuando se le acerca un pela’o y le pregunta:

― Oye Filósofo, si la persona a la que amas tiembla cuando la abrazas, sus labios están ardientes como brasas, su respiración es agitada, sus ojos brillan febrilmente y están a punto de desorbitarse, ¿eso significa que me ama?.

―  ¡No!, mándala inmediatamente al médico, eso significa que… ¡¡¡LE PICO EL CHIKUNGUNYA!!!”.