LA MANCHA NEGRA

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Por Angel Virgen Alvarado

1989 fue un año aciago para Matamoros.
Los springbreakers (estudiantes norteamericanos que en los meses de febrero y marzo de cada año, llegaban a vacacionar a esta ciudad) causaban enormes trastornos y, aunque la derrama económica que generaban era importante, los perjuicios eran más que los beneficios.
Cada año, por casi dos meses, cada tarde-noche, a lo largo de la avenida Álvaro Obregón, los jóvenes estudiantes eran protagonistas de hechos muy bochornosos:
Se orinaban en las banquetas, en las cocheras de las residencias, las muchachas se despojaban de sus blusas y camisetas enseñando el busto e inclusive, algunos jóvenes incurrían en actos reñidos con la moral en México.
Las madres de familia que vivían por el rumbo de la Colonia Jardín, prohibían a sus hijas que salieran a la calle.
Los “gringos”, ni eran interrumpidos, ni molestados por las autoridades porque, decían, eso era ahuyentar el turismo.
Aunque se sabía que en el sur de la Isla del Padre, Texas, a los springbreakers no se les daba hospedaje, porque destrozaban las habitaciones.
Allá eran personas no gratas.
Por “desmadrozos”, ni en su tierra los querían.
Lastimoso era ver como hermosas jovencitas yanquis se convertían en las principales promotoras para beber cerveza y tequila.
Los comerciantes mexicanos, cada que aparecían los springbreakers se frotaban las manos.
“El gasto que hacen estos gringitos es como otra cosecha”, – decía el dueño de un establecimiento de bebidas embriagantes.
Por su parte, la gente de bien afirmaba que los springbrakers eran una auténtica pesadilla.
“Los jinetes del Apocalipsis son de teta comparados con estos jóvenes”, – gruñían.
Hay que saber que algunos jóvenes no se conformaban solo con cigarros, cerveza y licor.
Estos buscaban emociones “más fuertes”: Buscaban drogas.
Al finalizar marzo de 1989, los springbrakers se comenzaron a regresar a sus casas.
Pocos días después de que los estudiantes se fueron, a lo largo de la avenida Álvaro Obregón aparecieron pegados en postes y puertas de los comercios allí enclavados, cientos de avisos con la fotografía de un jovencito y la leyenda:
“SE BUSCA.
ES MARK KILROY. Se agradecerá a quien informe a los teléfonos….”.
MARK KILROY era un estudiante de los springbrakers que en esas vacaciones del 1989, había desaparecido misteriosamente en Matamoros.
Semanas más tarde, por azares del destino, la Policía Judicial Federal, siguiendo a un individuo que no había respetado el alto en un retén de la carretera Matamoros-Reynosa, dio con el rancho Santa Elena.
Allí se había ido a esconder el infractor. Allí lo hallaron.
Delató a algunos de sus cómplices y arrestaron casi a todos.
Y en las investigaciones posteriores se conoció que en ese lugar algunos jóvenes, bajo el influjo del alcohol y las drogas, practicaban ritos satánicos.
Habían nombrado entre el grupo a un jefe y a una sacerdotisa.
Lo más terrible fue cuando se conoció que allí hacían sacrificios humanos.
El jefe era un cubando residente de Estados Unidos.
Ellos confesaron que, una noche en la Álvaro Obregón, MARK KILROY les pidió droga y ellos se lo invitaron a subir a su auto y el joven springbraker los acompañó.
El muchacho ya no volvería más.
Confesaron que allí le habían dado muerte igual que hicieron con otros jóvenes.
La noticia llenó de espanto y horror a todos.
Las autoridades federales permitieron que vinieran representantes del gobierno yanqui y exhumaron los cadáveres.
“¡NARCOSATANICOS!”, – tituló la prensa la noticia.
Y a Matamoros le cayó encima aquella mancha negra.
El turismo desapareció.
La imagen de Matamoros en el mundo fue terrible.
Los hombres de bien, los que aman a Matamoros, comenzaron a luchar para lavar aquel descrédito.
4 AÑOS MAS DESPUES…
En 1993, la organización de MISS USA, designó a la Isla del Padre, Texas, como la sede del concurso.
Las mujeres más hermosas de Estados Unidos estarían en el “Mágico Valle del Río Grande”.
Las ciudades de Mission, McAllen, Harligen  y Brownsville, aportaron a la organización del concurso MISS USA,  entre 25 mil dólares y 50 mil dólares  para que las “Miss”, las señoritas del concurso, fueran a pasear a esas ciudades.
TOMAS YARRINGTON, a la sazón alcalde de Matamoros, ofreció 100 mil dólares a la organización del concurso para que las más hermosas mujeres de Estados Unidos vinieran a pasear a nuestra ciudad, por la plaza Hidalgo, por la avenida Álvaro Obregón, por el museo Casamata.
Como es natural, hubo severas críticas.
Pero las MISS, vinieron.
Y se tomaron fotografías y videos de aquella histórica visita de bellas mujeres norteamericanas a Matamoros.
El objetivo era borrar aquella mancha negra que había caído sobre Matamoros.
Después de eso, otra vez volvieron los negocios de turismo a florecer y otra vez volvieron los extranjeros a pasear por esta ciudad.
Aquellos100 mil dólares aportados, habían sido realmente poco para el beneficio que se buscó y se obtuvo.
Ayer, JESUS ROBERTO GUERRA VELASCO, el candidato independiente a la presidencia municipal de Matamoros, reconoció algo que cala:
“Tenemos mala imagen en el mundo ¡Tenemos que cambiar esa imagen!”.
Y añadió: “Estando en Miami, Florida, una mujer dijo que Matamoros era un pueblo de satánicos.
Le dije que no. Le dije que Matamoros había sido escogido por Dios para señalar a aquellos que andan en busca de las drogas.
Lo hice para defender mi pueblo”, -dijo JR con sinceridad.
La charla con JESUS ROBERTO ayer, fue como suele ser cuando se platica con él: Muy amena.
Dijo cosas importantes derivadas de sus recorridos por este Matamoros “muy diferente” al que él gobernó hace 30 años.
-“Estamos muy contentos con la campaña… Pero tristes por la situación que guarda Matamoros y sus gentes”-, dijo.
JR aseguró que en sus visitas a las colonias ha encontrado muchos problemas.
Dijo que es necesario impulsar el turismo para que en ese sector, y en otros más, se reactive la economía.
Que se requiere crear la policía municipal, la infraestructura de la ciudad. Que se tienen que realizar obras “que no se ven… Pero que se necesitan”-.
Que es necesario promover la Playa Bagdad para que haya inversión.
El área del restaurante donde se realizó el desayuno-entrevista, estaba llena de periodistas.
Casi un centenar de comunicadores lo escuchaba atentamente.
Realmente el poder de convocatoria de JR, con los comunicadores, jamás ha estado en duda.
JR, el candidato independiente a la presidencia municipal anunció que este domingo 22 de mayo, en (“Chihuahua, tengo que decirlo) “en los campos del América” hará un “pre-cierre” de campaña.
Con la sola mención de “el América”, el ambiente se puso movidito.
Unos a favor, otros en contra del popular equipo de fútbol mexicano.
Finalmente dijo que el 29 de mayo cierra su campaña con “un gallo” (desfile de vehículos).
Que lo hará por varias vías para no entorpecer la circulación.
Ese fue, JR, en persona.
Con recuerdos, destellos y chispazos de nuestra historia moderna.
Historia de la cual, por haber sido alcalde… Forma parte.
Por hoy, es todo.
P.D.- Nos leeremos el domingo en CRONICA SEMANAL.

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