En el penúltimo día de la primavera, la violencia, provocada por los bloqueos carreteros arbitrariamente montados por “profesores” de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación –CNTE-, estalló y el saldo no pudo ser más terrible:
Ocho muertos, 41 policías federales heridos, y 53 civiles lesionados, además de 21 detenidos.
El domingo pasado, 19 de junio, se realizó un operativo policial para retirar el bloqueo en la autopista Oaxaca-Cuacnopalan, a la altura del municipio mixteco de ASUNCION NOCHIXTLAN.
En él participaron 800 policías federales y estatales.
Los “profesores” (los mismos que dicen estudiaron para educar, pero no educan a nadie pues desde hace meses dejaron las aulas) habían bloqueado ese punto protestando contra la Reforma Educativa.
La Reforma Educativa establece que los profesores deben someterse a examen de oposición para conocer el nivel académico de ellos y, en consecuencia, si no aprueban los exámenes, reubicarlos en otras áreas.
Nadie los va a correr de su trabajo.
Pero los profesores no quieren exámenes.
Por eso se revelan y actúan como verdaderos vándalos.
¿Por qué bloquear las carreteras causando daños a terceros?.
Lo que más reprueba la sociedad es enterarse de que los líderes de estos “profesores”, son verdaderos lángaras, aprovechados que se enriquecen a costillas de los maestros que si quieren dar clases.
¿No acaso vimos la semana anterior que unos profesores de Chiapas fueron vejados, entre ellos tres maestras de la tercera edad, cuando les cortaron el pelo porque ellos si iban a dar clases?.
Pero en Oaxaca las cosas pasaron a mayores: Hubo muertos y heridos.
Los profesores atacaron a la policía a machetazos, con cocteles molotov y cohetones.
Hay policías sin dedos, policías quemados de los pies y algunos heridos de gravedad.
Desde hace ocho días, integrantes de la Coordinadora realizaron bloqueos carreteros que afectaron a 37 puntos de comunicación entre Oaxaca y Ciudad de México, Puebla, Veracruz, Chiapas y Guerrero.
El comisionado general de la Policía Federal, ENRIQUE GALINDO dijo que el domingo se activó el operativo de desalojo entre las 7:00 y 8:00 de la mañana.
Después de las 10:00 horas, los manifestantes se reagruparon.
Todo empezó con las trazas habituales de los choques entre los maestros y la policía.
Con barricadas de vehículos en llamas y lanzamiento de objetos.
Pero en un punto, la situación se descontroló por completo y pasó a un terreno que hasta ahora no se había pisado.
Dos mil profesores rodeó a 800 policías.
El jefe de la Policía Federal, ENRIQUE GALINDO, dijo que se trató de una “emboscada” que los “envolvió” con cócteles molotov y cohetes artesanales y que escaló de pronto a los balazos contra los agentes y contra los propios manifestantes.
Ante la situación, llegaron refuerzos especiales que respondieron con fuego.
Los seis muertos tenían entre 19 y 33 años.
Dos de ellos formaban parte de la protesta y los otros cuatro no, de acuerdo con la versión oficial.
Se investiga si los balazos mortales que recibieron fueron disparados por la policía o por los supuestos atacantes imprevistos.
Hubo más de 100 heridos, entre ellos medio centenar de agentes, ocho heridos de bala.
El Comandante sostiene que los responsables fueron grupos radicales que no están vinculados al movimiento de los maestros y que durante el ataque llegaron a sumar “más de 2.000” individuos.
Hasta ayer había 21 detenidos.
Los de la CNTE ya han pedido la renuncia del Gobernador de Oaxaca, GABINO CUE, y del secretario de Educación AURELIO NUÑO, funcionario de la máxima confianza del presidente PEÑA NIETO.
Y a la velocidad que están tomando las cosas no es de asombrarse de que ya estén pidiendo que el propio presidente PEÑA pida licencia, porque si piden que renuncie, renunciar no puede, ya que tiene un cargo de elección popular.
Aunque los profesores de la CENTE… Ni eso saben.
PERIODISTA MUERTO
El mismo domingo en Juchitán, Oaxaca, fue asesinado el reportero ELIDIO RAMOS ZARATE, del periódico El Sur.
El periodista, que cubría las protestas de los maestros contra la Reforma Educativa, estaba descansando en un banco cuando dos individuos en moto se le acercaron y le dispararon con armas largas.
RAMOS, de 44 años, era el responsable de la información policiaca de su diario.
En el periódico “El Sur” no había constancia de amenazas de muerte contra su periodista.
Por hoy, es todo.