– Damnificados políticos buscan a Chuchín
– Tenían asegurados puestos con Baltazar
– Recorte presupuestal afectará el arranque
SI LA Sala Regional del Tribunal Federal Electoral con sede en Monterrey no dispone otra cosa, el licenciado JESUS DE LA GARZA DIAZ DEL GUANTE, alcalde electo, habrá de tomar las riendas política, económica y social en este puerto fronterizo a partir del primero de octubre.
Como es del dominio público, el Partido Acción Nacional y su candidata VERONICA SALAZAR VAZQUEZ así como el candidato independiente JESUS ROBERTO GUERRA VELASCO se inconformaron con la decisión local del Consejo Municipal Electoral y judicializaron el proceso para la elección por la presidencia municipal de Matamoros.
Las irregularidades e inconsistencias que a criterio de los inconformes evidencian fraude electoral, están sometidos al escrutinio de la autoridad en la materia.
Como es natural, la intervención de los tribunales ha polarizado la opinión pública de los electores locales. Por un lado, quienes aseguran que la judicialización del proceso eleccionario no cambiará la decisión ciudadana mostrada en las urnas y, por el otro, los simpatizantes panistas e independientes que no dudan de las pruebas recabadas y que, incluso, afirman que acudirán hasta la Suprema Corte de Justicia.
Sin embargo, al margen de la decisión final de la autoridad en la materia y bajo el estatus de alcalde electo, el licenciado DE LA GARZA DIAZ DEL GUANTE enfrentará, entre otros, un par de escollos que se antojan bastante difíciles de salvar. El primero, la falta de recursos en el inicio de su administración y el recorte presupuestal como consecuencia de la situación económica mundial. Y, dos, las peticiones en cascada de los numerosos damnificados que dejó la devastadora ola azul en la jornada comicial del 5 de junio.
Pero…. analicemos.
Aun y tomando en cuenta que el gobernador tamaulipeco a partir de octubre próximo, FRANCISCO JAVIER GARCIA CABEZA DE VACA, no asuma actitudes revanchistas tal y como lo ha afirmado, los recursos federales del nuevo presupuesto habrán de fluir hasta el primer trimestre de 2017. Cierto es que los presupuestos estatales y municipales se calculan a 12 meses y no a nueve. No obstante, es una práctica común que en los relevos de mandatos el saliente no deje nada en caja para el entrante.
Además, otro serio problema que enfrentará el diputado federal con licencia es el corto período de su responsabilidad constitucional circunscrito a tan solo 24 meses. Si sumamos el trimestre de entrada más un par de meses para que lleguen las partidas federales, es fácil deducir que la situación se complica.
Desde otra perspectiva, CHUCHIN DE LA GARZA habrá de emplearse a fondo con las numerosas peticiones para formar parte de su gabinete y equipo de trabajo. De entrada, los matamorenses que se la jugaron con BALTAZAR HINOJOSA OCHOA y que consideraban tener empleo seguro durante los próximos seis años, todavía no se reponen de la sorpresa electoral.
El problema estriba en que una administración municipal no tiene tantos puestos administrativos para dar cabida a todos los damnificados políticos. Además, como es justo suponer, deben llevar mano quienes trabajaron en la campaña del actual alcalde electo.
Difícil panorama se vislumbra para el licenciado JESUS DE LA GARZA a la hora de cumplir con los suyos y, al mismo tiempo, dar cabida a las recomendaciones que muy seguramente le sugerirá BALTAZAR HINOJOSA OCHOA.
Pero como primero es el uno y luego el dos, hay que esperar el resultado final del árbitro electoral y luego las decisiones que se tomen en el ámbito presupuestario e integración del gabinete y direcciones administrativas.
Y hasta la próxima.
mariodiaz27@prodigy.net.mx