Horacio Ortiz Renán comparece ante Diputados y acusa bajos sueldos para personal del Poder Judicial.
El ingreso que reciben los jueces, secretarios del Poder Judicial del Estado, no es suficiente para que estos vivan en la honrosa mediana republicana que promovía Benito Juárez, afirmó Honorato Horacio Ortiz Renán, quien fue aprobado como magistrado del Supremo Tribunal de Justicia del Estado, por la Comisión Permanente del Congreso del Estado.
Al comparecer ante los miembros de la Comisión Permanente del Congreso del Estado, el aspirante a magistrado señaló que es necesario que el Poder Judicial del Estado disponga de más recursos a efecto de impulsar la capacitación de jueces, secretarios y demás personal del Poder Judicial, sobre el nuevo sistema de justicia penal acusatorio.
Insistió en que es necesario que los jueces tengan una mayor capacitación y preparación sobre el nuevo sistema de justicia penal a efecto de tener mejores soluciones.
Como resultado de la falta de capacitación, hay criterios disímbolos entre agentes del Ministerio Público y jueces, lo cual viene a incidir en la procuración y administración de la justicia.
Por ello insistió ante los diputados en la necesidad de que se destinen más recursos para la captación real y efectiva, así como para contar con más salas para la celebración de los juicios orales.
Reconoció ser amigo personal del gobernador electo Francisco Javier García Cabeza de Vaca, así como secretario del Ayuntamiento de Reynosa que presidió.
El gobernador Egidio Torre Cantú, hizo la propuesta de Horacio Ortiz Renán como magistrado del Supremo Tribunal de Justicia del Estado.
Por otra parte, Ortiz Renán desmintió la versión en el sentido de haber sido objeto de una investigación por parte de la Procuraduría General de la República.
Explicó que una ocasión un empresario solicitó contratar el parque López Mateos para llevar a cabo la celebración del Día del Niño, pero sucedieron hechos que escaparon a su control e incluso sus negocios fueron cateados. El pidió la renta, pagó sus derechos y se concedió no se sabía lo que iba a suceder posteriormente.
Pero Ortíz Renán también fue investigado por la Procuraduría General de la República, debido a que en su oficina había sido instalada una antena repetidora, debido a los altos costos de las llamadas de larga distancia.
Desde el 2005 dejó usar las antenas e incluso le robaron el equipo de repetición, al hacer uso del teléfono celular.
Insistió en que únicamente quedó la torre, pero no había antena repetidora y fuente de poder.
Añadió que en varias ocasiones fue objeto de inspección por parte del Ejército Mexicano y la Policía Federal, pero al no encontrar nada no fue objeto de acusación alguna.