Estás haciendo fuera de la olla. . .

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Manejaba, después de llover, a una velocidad promedio de 20 mentadas de madre al Alcalde por cuadra, de copiloto un viejo compañero de escuela, bastante práctico pregunta la razón de los recordatorios maternales a tan alta luminaria de nuestra política local.

¿No ves como están las calles llenas de baches?, la respuesta fue lapidaría, “y tú no viste cuando lo estaban eligiendo, o peor aún, cuando lo hacían candidato”.

De ello sentenció que “estaba haciendo fuera de la olla”, que las groserías las merecíamos los ciudadanos y no por las decisiones que tomamos en las urnas porque ahí podemos atinarle o equivocarnos pero si por no trabajar con los gobiernos municipales para obligarlos a ser más eficientes, menos rateros y, sobre todo, cumplirle a la gente en cosas tan elementales como recoger la basura o tapar los baches.

Sirva el comentario de preámbulo para hablar sobre la necedad de los mexicanos de quejarnos, dolernos y hasta llorar por lo que sucede en el extranjero sin notar lo que ocurre en nuestra casa.

Mire usted, ayer estuvo en México el candidato a Presidente de los Estados Unidos por el Partido Republicano, Donald Trump, las redes sociales se saturaron de críticas contra Enrique Peña Nieto y contra el gringo porque tuvieron un diálogo en la residencia oficial de Los Pinos, según la gente deberíamos sentirnos ofendidos por tal situación.

Vamos por partes, primero, el gringo puede ser presidente de la nación más poderosa del mundo y nos guste o no debemos tener un trato directo con él, con su equipo, por lo que la acción de Enrique Peña Nieto es acertada, además Estados Unidos tiene todo el derecho de hacer lo que le plazca en su casa, si quiere un muro, o dos, o mil, pues que los construya, igual si necesita poner militares a cuidar sus fronteras o cosas parecidas, pues que lo haga.

Que dice Trump que los mexicanos somos delincuentes, asesinos, que desestabilizamos su país, la verdad es que eso y una llamada de misa o una mentada de madre es lo mismo, va quien lo desea.

Algo más importante todavía, quizá la queja contra Enrique Peña Nieto debe ser no por recibir a Donald Trump sino por la situación de México, la pobreza, la violencia e inseguridad que obligan a la gente a intentar cruzar la frontera de manera ilegal, cuando México resuelva sus problemas créalo, los gringos nos van a suplicar que les mandemos trabajadores y hasta quien pueda hacer felices a sus mujeres, cortándoles el pasto o en la plomería, claro.

Cierto, cierto, con Peña Nieto aplica lo de las mentadas de madre al alcalde por los baches, debimos tener más cuidado al elegirlo de presidente de esta hermosa nación y, no solo ello, también debemos participar en su gobierno, vigilarlo, proponer, trabajar por él, auditarlo para que las cosas se hagan de manera correcta quieran o no.

Así es, en lugar de seguir quejándonos el camino correcto es participar más en la política, elegir de manera adecuada a los políticos y vigilar a los que van a gobernarnos, a tener en sus manos los presupuestos y la autoridad sobre las policías.

Obvio es, nos hace falta ser ciudadanos, crecer, alcanzar la mayoría de edad para, además de elegir, estar todos los días metidos en la política, en la forma de gobernar de los políticos, en proponer, trabajar con ellos y, sobre todo, vigilarlos, ya no permitir más que se despachen con la cuchara grande ni sean indolentes para resolver los problemas que nos duelen a todos.

Parece, finalmente, que tiene algo de razón quien afirma que estamos haciendo fuera de la olla, que nos quejamos de Trump sin saber que el problema es en México, que nos quejamos del gobierno sin querer darnos cuenta que lo elegimos mal o lo hemos abandonado y por eso hacen lo que quieren o lo que pueden, que nos quejamos mucho de los alcaldes a sabiendas de que los hemos dejado robar a manos llenas sin que lo detectemos porque a nadie le importó saber que han estado haciendo en tres años que estuvieron administrando nuestros recursos.

En otras cosas… La cristalización de un proyecto trabajado por mucho tiempo es la Casa Hogar del Niño Regional ubicada en San Fernando y que dará servicio a niñas, niños y jóvenes que en su momento requieran del servicio de éste moderno centro asistencial y que el día de hoy fue puesto en funcionamiento por el Gobernador del Estado Egidio Torre Cantú y la Presidenta del DIF Tamaulipas María del Pilar González de Torre.

Éste edificio cuenta con un área para personal administrativo, una sala de adaptación para los recién llegados, un espacio de Casa Cuna para los más pequeños, un área de estimulación temprana, dormitorios para niñas, niños y jóvenes, cocina, comedor, biblioteca, oratorio, palapa recreativa, cancha de basquetbol, lavandería, bodega, estacionamiento y una plazoleta central.

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