Conocimos sus laboratorios en California, donde pocos pueden entrar. Vimos parte de lo que será el futuro.
PALO ALTO, California. Una de las empresas que dio origen a Silicon Valley hace más de siete décadas es HP, la cual continuamente busca la forma de reinventarse, entrar a nuevos mercados y liderar la innovación tecnológica.
Esto lo logra gracias a sus Laboratorios en Palo Alto, California, que fueron fundados hace 50 años y en donde combinan a personas de varias ramas como la ingeniería, biomedicina, sistemas, seguridad y otros para desarrollar nuevos productos.
Excélsior tuvo la oportunidad de conocer y recorrer parte de estos laboratorios, algo que HP raramente permite tanto a medios como a accionistas o socios de negocios.
“Vamos a abrirnos al mañana. Vamos a mostrarles cosas que no le hemos mostrado a la gente en muchos años. No van a ver todo, nos guardaremos algunas cosas, pero si verán algunas partes de cómo luce el futuro”, fueron las palabras de bienvenida del jefe de la Oficina de Tecnología y director de los Laboratorios de HP, Shane Wall.
El recorrido comienza después de pasar varias puertas de seguridad y bajar algunas escaleras, todo esto para llegar a un largo pasillo cuya pared está cubierta de pequeños cuadros, los cuales en realidad son las aprobaciones de muchas patentes conseguidas por HP en varios campos.
A partir de ahí, se pueden ver varias puertas, todas cerradas y con sistemas de seguridad para evitar que extraños entren o puedan tener una idea de lo que hacen.
AMBIENTE DIGITAL
La primera parada es un laboratorio enfocado al internet de las cosas y cómo se puede poner la tecnología a disposición de las personas, sin que éstas la perciban. Es el laboratorio más nuevo, sólo lleva operando algunas semanas, y simula tanto una casa como una oficina. Aquí se prueban las diferentes superficies que potencialmente pueden mostrar información y hacer streaming, como una mesa o una pantalla, para lo que cuentan con un sistema llamado Nizza.
Asimismo, prueban tecnologías relacionadas con el reconocimiento facial. Tienen una aplicación que reconoce tu rostro y comienza a reproducir la música que te gusta, o bien, están analizando cómo una cámara puede saber el número de personas en una habitación aunque éstas se encuentren de espaldas.
TERCERA DIMENSIÓN
Uno de los laboratorios donde no permiten fotografías o video es el dedicado a la impresión en 3D. Aquí prueban la Multi Jet Fusion y qué tipo de nuevos materiales o agentes se pueden agregar para manufacturar productos funcionales.
En el mediano plazo prevén que ésta permita imprimir partes en diferentes colores, con varios tipos de rigidez en una misma pieza, añadir más componentes electrónicos, marcar las piezas con números de serie visibles y no visibles al ojo humano, así como usar otro tipo de materiales como elásticos, polímeros o una combinación de éstos.
MICROFLUIDOS
Uno de los laboratorios que más sorprende es el relacionado a los microfluidos, ya que éste tendría un impacto directo en la industria de la salud. En primera, cuentan con un dispositivo que es capaz de “imprimir” en una matriz pequeñas porciones de fluidos, los cuales pueden ser sangre, pruebas químicas y deja atrás las clásicas pipetas. Es conocido como HP D300 Digital Dispenser y ya se comercializa en varios laboratorios de salud o de investigación.
Además, la tecnológica también está investigando el uso de biosensores para detectar comida adulterada, componentes tóxicos en el aire o en pruebas biológicas. Aunque se trata todavía de un proyecto, ya cuentan con el dispositivo que puede encontrar determinadas partículas y luego analizarlas en un espectrómetro.
El equipo, que mide cinco centímetros, es de un solo uso y puede modificarse para encontrar sólo un tipo de partículas o varias a la vez.
INMERSIÓN
No hay que olvidar que HP es una compañía que, como tal, busca tener ingresos y una parte del éxito de algunos productos se debe a este laboratorio. Los encargados se dedican a áreas como la sicología, el marketing y similares, quienes se han percatado que las nuevas generaciones buscan “experiencias”.
Por ello es que sus proyectos se dedican a crearlas, usando herramientas digitales, y así lograr un acercamiento con el cliente.
Una muestra de ello, es que eligieron a diez familias cuyos miembros viven en diferentes países. A cada una de ellas se le dio una réplica de la casa de su familiar lejano, hecha gracias a la impresión 3D. Estas pequeñas casas se colocaban en una caja que servía para mostrar el clima, ambientar si llovía o nevaba, y hasta encendía las luces cuando alguien se encontraba en ese hogar a miles de kilómetros.
Si bien aún no saben si pueden darle un uso comercial a dicho proyecto, vieron como la interacción entre las familias cambiaban, se comunicaban más o limaban asperezas si no se llevaban bien.
SEGURIDAD
Ante un mundo que estará muy conectado, la seguridad se vuelve fundamental. HP se ha dedicado a investigar formas de tener seguridad end to end, es decir, en cada dispositivo.
Por ello desarrollaron un simulador que evita la infección por malware en infraestructura crítica, como podría ser un semáforo inteligente.
IMPRESIÓN 3D, EL RETO PARA HP
El mayor reto para HP en los siguientes meses es demostrar la ventaja competitiva que tiene en el mercado de impresión 3D, particularmente en el área de manufacturas, y desarrollar un ecosistema cuyo crecimiento sea sostenible.
De acuerdo con Christoph Schell, presidente de Américas en HP, la tecnológica tiene que crear un mercado para la impresión 3D desde cero e impulsarlo. Esto porque, si bien existe mucha competencia, las empresas del sector se enfocan sólo en una región o en cierto material.
“La impresión 3D es una gran industria, pero no está creciendo mucho, no hay una competencia nacional”, explicó a Excélsior.
En el marco del 50 Aniversario de los Laboratorios HP, comentó que este escenario es una oportunidad de encontrar socios y realmente construir un ecosistema que saque provecho a la impresión 3D y su uso en diversas industrias.
De hecho, la tecnológica hace poco presentó todo el sistema para su negocio de impresión 3D y los dos modelos de impresoras que existirán con socios como Nike o BMW decididos a utilizarlas.
“Es muy interesante cómo jugamos, no sólo es la pieza de hardware, es también la plataforma abierta en el lado de materiales y aplicaciones. Esperamos que haya un montón de socios que pueden unirse y formar parte del ecosistema”, confió Schell.
Sobre todo porque la visión de la compañía es que la próxima revolución industrial sea provocada justamente por este tipo de impresoras, las cuales permitirán producir artículos en cualquier lugar, momento y personalizados.
Y EN MÉXICO
Para Schell, el mercado mexicano es muy “maduro”, se desempeña bien y se ha mantenido estable en el último año, a pesar de las fluctuaciones y debilidad del peso.
“La moneda siempre tiene un impacto, algunas veces negativo, otras positivo, y tenemos que lidiar con eso. México ha tenido algunas fluctuaciones en su moneda, pero eso no impacta mucho en la demanda”, aseguró.
De hecho, consideró que el negocio tanto de consumo como empresarial en materia de computadoras personales e impresoras es muy sano y seguirá creciendo.
“El verdadero reto en el país es cumplir con las expectativas y requerimientos que tienen los clientes con respecto al servicio del producto y el soporte que se le puede ofrecer ante cualquier eventualidad”, dijo.
Lo anterior debido a que México es un país con una geografía muy grande, lo que dificulta tener presencia en cada lugar para satisfacer las necesidades del cliente.
Indicó que, afortunadamente, cuentan con varios socios en el país