A los payasos se les acabó la risa; están tristes

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Los payasos victoreases preocupados por la serie de hechos violentos.
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El trabajo para los exponentes de este oficio, ha caído hasta en un 80 por ciento durante las últimas semanas, debido a la serie de hechos violentos o bromas de mal gusto.

A los payasos se les acabó la risa. Están tristes.

Les preocupa que hoy tienen más dificultades para trabajar para llevar el pan a su casa, sostener a sus familias.

Y es que el trabajo para los payasos ha caído hasta en un 80 por ciento durante las últimas semanas, debido a la serie de hechos violentos o bromas de mal gusto en los cuales se ha usado el disfraz de payaso.

“Somos objeto de burla o nos agraden. Ya ha habido compañeros que por necesidad se suben a trabajar en los camiones urbanos y han sido agradedidos”, coinciden “Raymundín”, “Saltarín” y “Chirrín”.

Ante esta situación, payasos de Reynosa y Ciudad Victoria se reúnen para buscar formas de atajar esta situación que les ha afectado severamente en sus ingresos.

“Ahora en un fin de semana voy a solo dos fiestas infantiles, si bien me va. Cuando antes estaba lleno desde el día jueves a domingo, así la podíamos ir pasando”, sostuvo Mario Alberto Soto García “Saltarín”.

Raymundo Saldaña Casso “Raymundín”  atribuye esta situación a películas como IT, Clown, Hallowen y otras donde el personaje principal es  un payaso de terror, violento.

Agregó: “Nosotros no somos así. Hacemos un trabajo limpio, sin maldad alguna solo haciendo reír a los niños, a las familias”.

Continuó diciendo que en estos tiempos de inseguridad, violencia, tristeza, es importante que la gente ría.

“Pero con estas cosas de crearnos a través de las redes sociales una imagen de maldad, violencia a los payasos solo nos están afectando en nuestro trabajo”.

En las ciudades fronterizas de Matamoros, Reynosa y Nuevo Laredo, debido a su vecindad con los Estados Unidos, se ha desarrollado una psicosis respecto a los payasos, por lo cual también enfrentan desempleo.

En Reynosa los payasos han decidido reunirse para buscar cambiar la imagen que ahora se quiere dar de ellos.

En tanto Enrique Castillo Leal “Chirrín Chirrión” sostiene que quien comete esos hechos como delitos y bromas de mal gusto en las cuales en ocasiones personas resultan lastimadas “los cometen personas que se disfrazan de payasos, no son payasitos”.

Y recalcó: “Nosotros nos pintamos la cara, no la cubrimos con una máscara como lo hacen esos”.

“Saltarín” y “Raymundín”, coincidieron en señalar que debido a la situación económica e inseguridad, su trabajo ya había descendido, pero ahora es una situación de dañar la imagen de los payasos, por lo cual ya tienen problemas para poder sostener a sus familias.

Mario Alberto Soto mencionó que también ha considerado la conveniencia de que los payasos de esta ciudad capital también se reúnan a fin de encontrar formas de hacer cambiar la imagen negativa que se quiere dar de los payasos.

“Somos gente modesta que vivimos de nuestro trabajo. Tenemos el don de poder hacer reír a la gente, que se divierta con nuestras rutinas, por ello es injusto que se quiera dar de nosotros una imagen de lo que no somos”.

Insistió: “Hay mucha violencia, temor entre la gente por la inseguridad por eso nosotros somos una opción para que la gente se divierta y se olvide por un momento de los ratos amargos”.

“Nosotros nacimos con la gracia de hacer reír a la gente, no sabemos hacer otra cosa mejor. Y es gacho que ahora personas que algunas vez se rieron con nosotros ahora hagan esto”, agregó “Raymundín”.

“Chirrín Chirrión” interviene para señalar que lastiman a todos los payasos con la frase. “Te va a cargar el payaso”.

“Nos quieren hacer aparecer como si fuéramos la maldad, ya hasta los niños nos tienen miedo y eso no se vale”, opinó.

A su vez “Saltarín” , comentó: “Antes las piñatas se hacían a las cinco, seis de la tarde,  y terminaban a las ocho de la noche, pero ahora con la inseguridad las fiestas infantiles empiezan a las tres y terminan a las seis de la tarde eso no es malo, lo malo es que no tenemos trabajo”.

Con sus rostros pintados de colores, pero serios muy serios, casi tristes “Raymundín” “Saltarín” y “Chirrín” coinciden en que todas las personas llevan un niño dentro que le gusta reír y jugar, por lo cual los payasos seguirán existiendo “pero no es justo lo que ahora se está haciendo”.

CITA TEXTUAL…

“Nos quieren hacer aparecer como si fuéramos la maldad, ya hasta los niños nos tienen miedo y eso no se vale”. .

“Chirrín Chirrión”/ Payaso

Chirrín Chirrión", no somos los malos, asegura.
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“Raymundín”, uno de los conocidos del público victorense.
“Raymundín”, uno de los conocidos del público victorense.