– Vientos del cambio impactan la barca tricolor
– Por falta de pago, renteros desalojan oficinas tricolores
– Poco a poco, priístas resienten efectos de la derrota
LOS efectos devastadores de los vientos del cambio no solo han causado estragos en la antiquísima nómina oficial, como pudiera suponerse. También, las ráfagas huracanadas panistas comienzan a dañar la estructura del Partido Revolucionario Institucional.
La alternancia política que se vive por primera vez en el estado de Tamaulipas ha motivado un drástico cambio en la ubre presupuestal, generando miles de damnificados, quienes, de la noche a la mañana se quedaron sin sus empleos, en una acción gubernamental que ha dividido a la opinión pública.
Paralelamente, el ahora expartido oficial ha iniciado la etapa de desmantelamiento de su estructura en el Comité Directivo Estatal ante la falta de recursos para sostener la maquinaria operativa tricolor.
Derivado de los daños colaterales que arrojó la jornada comicial del pasado cinco de junio, el PRI Estatal ha dejado de recibir alrededor de dos millones de pesos en prerrogativas. En consecuencia, la Secretaría de Finanzas del exinvencible está cerrando la llave financiera en distintas áreas, provocando, a su vez, inconformidad entre activistas y operadores políticos.
Quienes trinan de coraje e impotencia son, entre otros, HUMBERTO VALDEZ RICHAUD, secretario de Movimiento Territorial, y HECTOR NEFTALY VILLEGAS GAMUNDI, quien cobra como secretario de Acción Electoral del Comité Directivo Estatal del PRI.
Al respecto, ni la presidenta de ese instituto político, AIDA ZULEMA FLORES PEÑA, ni el secretario general, JOSE HERNANDEZ CUESTA, han brindado alguna explicación a la militancia.
Por lo pronto, ante el incumplimiento en el pago de renta, propietarios de inmuebles amenazan con colocar candados a oficinas priístas, toda vez que ya les han solicitado a sus titulares la desocupación total e inmediata.
A lo largo de 86 años nunca ocurrió una situación como la que enfrenta actualmente el Revolucionario Institucional. Todos los gastos de operatividad política corrían por cuenta del gobierno estatal y, lógicamente, de recursos económicos con origen en el Comité Ejecutivo Nacional.
Es decir, ningún presidente de partido, hasta RAFAEL GONZALEZ BENAVIDES, había sufrido estrechez económica. La separación del cargo de GONZALEZ BENAVIDES, para asumir la diputación plurinominal en la LXIII Legislatura tamaulipeca, motivó la asunción de FLORES PEÑA para cumplir interinamente el período estatutario.
Sobra decir que el arrollador triunfo de FRANCISCO JAVIER GARCIA CABEZA DE VACA en el pasado proceso electoral, prácticamente tomó por sorpresa tanto a la burocracia estatal como a los integrantes de la maquinaria eleccionaria tricolor.
Ante las nuevas condiciones políticas en la esquina noreste del país, el PAN se prepara y se fortalece para enfrentar la competencia electoral de 2018 con la ventaja que representa ser el partido en el gobierno.
En contraparte, el PRI habrá de luchar a brazo partido si es que desea recuperar la rienda política, económica y social en esta norteña entidad federativa. Desde un plano que pretende ser lo más objetivo posible, la realidad es que tal proyecto se antoja punto menos que imposible, por lo menos a mediano plazo.
A nivel local, cada día es más comentada la versión que sugiere que el doctor VICTOR GARCIA FUENTES, dirigente del comité municipal del PRI, se prepara para dejar ese cargo partidista y asumir la dirección de la clínica del ISSSTE.
Y hasta la próxima.
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