Chicago.- El alcalde de Chicago, Rahm Emanuel, anunció el domingo que esa ciudad estadounidense seguirá siendo un santuario para los inmigrantes indocumentados en ese país, como un mensaje a quienes se sientan amenazados por las políticas migratorias que prometió el futuro presidente Donald Trump.
Agencias.
Emanuel emitió el domingo un comunicado en el que reconoce que el resultado de la elección presidencial del 8 de noviembre hizo crecer “la incertidumbre entre las comunidades inmigrantes de Chicago y de toda la nación”.
Ante eso, dijo que Chicago mantendrá el estatus que le confiere la llamada Ley de Santuario, que desde hace 33 años prohíbe que policías y funcionarios municipales pregunten a las personas sobre su situación migratoria.
El texto de Emanuel también subraya que Chicago es una ciudad de inmigrantes desde su fundación “y aunque cambien los gobiernos, nuestros valores y compromiso de inclusión no lo harán”.
“No pierdan la esperanza, porque Estados Unidos los acepta; sus sueños serán honrados aquí”, señaló el alcalde en su comunicado.
El ganador de la elección presidencial dijo el domingo en su primera entrevista desde los comicios para el programa 60 Minutos de la cadena CBS que prevé deportar de inmediato hasta tres millones de inmigrantes que tengan antecedentes criminales; sin embargo, durante su campaña llegó a hablar hasta de 11 millones de inmigrantes como posible objeto de su política migratoria.
En Estados Unidos hay 37 ciudades santuario como Chicago y los alcaldes de Nueva York, Bill Blasio, y Los Ángeles, Eric Garcetti, prometieron mantener ese estatus a favor de los inmigrantes.
