Los costos de los insumos y producción de la tortilla se han elevado en más de un 20 por ciento, por lo cual es difícil seguir sosteniendo el actual precio al consumidor y por lo cual los propietarios de tortillerías han comenzado a aplicar un incremento de un peso en el kilo de éstas.
Enrique Yáñez Reyes, dirigente de la Federación de Propietarios de Tortillerías y Molinos de Nixtamal, señaló que no sólo enfrentan el problema de los aumentos en los costos de producción, sino también de la inseguridad, la violencia.
Para hacer frente a los incrementos en los costos de la harina de maíz, gas, y energía eléctrica, principalmente los tortilleros se han visto precisados aplicar un aumento de un peso en su producto y otros hasta dos pesos, según la calidad de la harina de maíz que usen.
El precio de la tortilla fluctúa de los 16 a 18 pesos por kilo en las diferentes tortillerías de la ciudad capital, en otras regiones de Tamaulipas ya alcanza los 20 pesos.
El costo de la tonelada de harina de maíz es de 11 mil pesos promedio y varía según la calidad de la misma. Como es este el principal insumo el cual más afecta en los costos de producción, comentó.
Pero hizo hincapié en que no es solo el aumento en los costos de los insumos el único problema que enfrentan, sino también el de la seguridad.
Durante los últimos cinco años Reynosa, Nuevo Laredo, Victoria, Matamoros, El Mante y Tampico, han cerrado más de 300 negocios de tortillerías por la inseguridad.
