Reconocen inocencia de mujeres indígenas

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Por primera vez, el Estado mexicano pidió perdón, se disculpó y reconoció la inocencia de las indígenas hñáhñú, Jacinta, Teresa y Alberta.

Agencias

México.- Por primera vez, el Estado mexicano pidió perdón, se disculpó y reconoció la inocencia de Jacinta Francisco, Teresa González y Alberta Alcántara -mujeres indígenas hñáhñú (otomíes) de Querétaro- quienes fueron sentenciadas por la institución hace más de una década por los delitos de secuestro y tráfico de drogas.
En el Museo Nacional de Antropología e Historia, la Procuraduría General de la República (PGR), a través de su titular, Raúl Cervantes, ofreció una disculpa pública a las mujeres hñahñu y reconoció públicamente su inocencia, luego de haber sido acusadas injustamente de los delitos de secuestro y tráfico de drogas y admitió que la dependencia incurrió en actos indebidos.
La PGR acusó a las mujeres, hace más de diez años, de delitos que no cometieron; fueron responsabilizadas, sin pruebas, de haber secuestrado a seis policías de la extinta Agencia Federal de Investigación (AFI), además de tráfico de cocaína.
Tras un largo proceso de defensa que llegó hasta la Suprema Corte de Justicia d la Nación, una sentencia del Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJFA) ordenó la reparación del daño por la condena emitida en contra de las indígenas y que fue de 21 años de cárcel.
El director del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, Mario Patrón, dijo que con este reconocimiento de inocencia se atestigua «un acto de esperanza» y agradeció a las mujeres indígenas por su «persistente búsqueda de la verdad».
Mencionó que Jacinta Francisco, Teresa González y Alberta Alcántara siguen con sus vidas pero este acto de injusticia las dejó marcadas de por vida. «Su perseverancia se ha vuelto un emblema de valentía», comentó.
En su participación, Teresa González recordó las acusaciones de las que fue objeto y el sufrimiento de su familia por no tener los medios para defenderla. «No sabíamos qué es lo que estaba pasando» y aseguró que esta disculpa pública es una gran victoria porque cierra estos 11 años de lucha, pero nunca será suficiente por los años de injusticias.
Entre lágrimas y con la voz rota, Alberta Alcántara recordó el tiempo que pasó en prisión y pidió a los indígenas que no se queden callados ante la injusticia. «Señor procurador espero no ser la última (que reciba) una disculpa pública, porque hay miles que viven casos como nosotras», dijo.
En su oportunidad, el procurador se dirigió a las tres indígenas, quienes a pesar de ser inocentes fueron encarceladas durante un tiempo que no podrá ser devuelto a estas mujeres a pesar de la disculpa de las autoridades. Dijo que al exigir lo que les corresponde, las indígenas movieron al Estado a cumplir con su verdadera función, cumplir con lo que mandata la ley.
«Ante ustedes, Alberta Alcántara y Teresa González, reconozco públicamente su inocencia respecto de los delitos que se les atribuyeron y por los que de forma injusta fueron privadas de su libertad», señaló el titular de la PGR a nombre del Estado mexicano.