Emmanuel Macron, de 39 años, fue elegido este domingo presidente de Francia -el más joven de su historia-
Agencias
París.- El centrista proeuropeo Emmanuel Macron, de 39 años, fue elegido este domingo presidente de Francia -el más joven de su historia- evitando así que esta potencia económica mundial cayera en manos de la extrema derecha de Marine Le Pen.
Con entre el 65.5 y 66.1% de los sufragios, este ex banquero reemplazará al socialista François Hollande que renunció a presentarse por falta de apoyo popular y del que fue ministro de Economía, según estimaciones de institutos independientes.
Lo hará en una Francia muy dividida políticamente entre las zonas urbanas (privilegiadas y reformistas) y las desheredadas (tentadas por los extremos). Macron, que no parece recular ante los desafíos, tiene varios por delante de gran calado como un desempleo endémico de 10%, la lucha antiterrorista y la crisis de la Unión Europea (UE).
Aunque Marine Le Pen, de 48 años, pierde por amplio margen, no es una derrota en toda regla para ella ni para su partido -el Frente Nacional (FN)- que ha convencido a entre el 33.9% y el 34.5% del electorado con promesas en contra de la inmigración y el euro. No sólo eso, sino que se ha hecho un hueco entre las principales fuerzas políticas del panorama nacional.
Un vendaval En apenas un año, desde que fundó el movimiento centrista ¡En Marcha!, Macron se abrió paso en un país en el que dos grandes partidos tradicionales de izquierda y derecha se alternaban en el poder desde hacía medio siglo.
Se los llevó por delante en la primera vuelta con un programa europeísta y liberal en temas económicos y sociales. Para la segunda partía con una ventaja holgada en las encuestas, reforzada en el debate con su rival, pero eso no le impidió un susto de último minuto, con un pirateo informático masivo de documentos cuyo origen se desconoce y que está siendo investigado por la justicia francesa.