Por Arnoldo García
Ramiro Ramos Salinas, expresidente del Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional, aseguró que su nombre estará en la boleta de los comicios del 2018.
Añadió que resulte ser el próximo presidente sustituto del Comité Directivo Estatal, no debe aspirar a ser candidato a un cargo de elección popular y aguardar para participar en los comicios del 2019.
Sobre sus intenciones de participar como aspirante a la presidencia del PRI Estatal, dijo que lo habrá de analizar y consultar, pues actualmente desempeña tareas dentro del Comité Ejecutivo Nacional del Partido.
Es positivo para el Partido exista una serie de aspirantes a la dirigencia estatal, pues ello es muestra de que éste se encuentra vivo y activo, pero sobre todo el poder contar con diferentes opciones para escoger la mejor sin imposiciones y de forma libre.
Pero aclaró que no se descarta como presidente sustituto, pues todo depende de las instrucciones que en ese sentido reciba del Comité Nacional y para lo cual en los próximos días sostendrá una reunión con el presidente Enrique Ochoa Reza.
El exdiputado Ramiro Ramos Salinas reveló que si trabaja para participar en la contienda electoral. “Me gustaría ser senador de la República, hay que ver donde puedo ser más útil a los electorales, donde puedo servir mejor al Partido. Si el partido me manda de candidato a diputado o de candidato a alcalde lo acato”.
“A mí me gustaría ser senador de la República, he adquirido experiencia legislativa, conocimientos, establecido relaciones y creo que ahí sería útil. Me encuentro preparado para ello. Pero sea cual fuere la indicación del Partido la habré de acatar, pero mi nombre estará en alguna de las boletas del 2018”.
Comentó que con ese propósito todos los días tiene comunicación con decenas de priístas y amigos con quienes trabajú en la elaboración de un proyecto.
En cuanto al proceso interno del Partido para elegir el presidente sustituto, el exdirigente mencionó que quien resulte ser presidente no debe ser candidato a un cargo de elección de mayoría y lo mejor sería compitiera hasta los comicios del 2019, a fin de que se centre en la elección del 2018.
