Secretario de Seguridad reconoce que los aparatos inhibidores, instalados en las cárceles, ya quedaron obsoletos.
Por Arnoldo García
Debido a la innovación tecnológica en los aparatos de telefonía celular, los inhibidores para evitar que salgan llamadas de los Centros de Ejecución de Sanciones son ya obsoletos e inútiles, indicó el secretario de Seguridad Pública del Estado, Luis Felipe López Castro.
Reconoció que de los reclusorios siguen saliendo llamadas de extorsión, simulación de secuestro y demás, por lo cual fueron instalados aparatos para inhibir las llamadas de telefonía celular en posesión de los internos e introducidos ilegalmente a los penales, pero estos son ya inútiles.
Hoy existen teléfonos celulares con una tecnología más moderna que pueden burlar los aparatos inhibidores, instalados en las cárceles, ya que estos quedaron obsoletos, comentó.
Así reconoció a los penales se siguen introduciendo teléfonos celulares para los usos de los reclusos, quienes con estos y desde adentro continúan con sus hechos delictivos.
“Desde adentro se siguen haciendo llamadas de extorsión, se fingen secuestros y dan órdenes para hechos delictivos”.
El vicealmirante López Castro comentó que es necesario rehabilitar las cámaras, el sistema de videovigilancia dentro de los penales a efecto de contar con una mayor vigilancia con el fin de tener un mejor control y evitar la entrada de armas de fuego, drogas, alcohol, teléfonos celulares y demás.
Apuntó que ante ello la Policía Estatal continuará haciendo cateos a los Centros de Ejecución de Sanciones en cuanto existan condiciones propicias y en forma sorpresiva, pues se busca evitar los enfrentamientos, pero también la introducción de las armas, drogas y demás.