Por ahora no existe ninguna iniciativa de ley específica y el proceso
de consultas aún continúa, expuso la vocera de la Casa Blanca
Agencias
Washington.- La Casa Blanca aseguró que el presidente estadunidense Donald Trump apoya la propuesta de elevar la edad mínima para la compra de armas de fuego, pero aclaró que el tema debe ser determinado en un proceso legislativo.
La vocera presidencial Sarah Sanders negó que el mandatario se haya retractado de esa propuesta, que prometió impulsar junto con otros cambios, ante la reciente matanza en una escuela de Florida.
“En concepto, el presidente aún lo apoya”, dijo Sanders a reporteros, luego que el mandatario confirmara haberse reunido con directivos de la Asociación Nacional del Rifle (NRA), la más influyente agrupación en el rubro, que se opone a regular o restringir el comercio de armas.
La semana pasada, luego de la masacre de la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas, en Florida, Trump prometió que promovería “fuertemente” elevar a 21 años la edad mínima para comprar un arma de fuego, y mejorar el sistema de verificación de antecedentes.
Nikolas Cruz, el sospechoso de la masacre que cobró la vida de 17 estudiantes y maestros en el ataque de este 14 de febrero, pudo comprar a los 18 años de edad un rifle de asalto semiautomático AR-15 con que llevó a cabo el ataque.
Sanders señaló que por ahora no existe ninguna iniciativa de ley específica y que el proceso de consultas aún continúa, y evitó precisar si el mandatario apoyará exigir una verificación de antecedentes para la compra de armas de fuego en ferias y exhibiciones.
“El presidente cree que debemos ver al fortalecimiento en la verificación de antecedentes y estamos viendo todas las diferentes formas de hacer eso, y no hemos hecho una determinación final sobre la forma que tendrá”, dijo.
El debate sobre la necesidad de mejorar dicha verificación cobró fuerza luego de revelarse que Cruz pasó la verificación de antecedentes, pese a su historial de inestabilidad mental y conducta violenta por el que fue expulsado de la escuela, a la que volvió semanas después para cometer la masacre.
