Por muchos años los municipios fronterizos tuvieron una gran evolución desde Nuevo Laredo hasta Matamoros, fue en los tiempos en que tuvieron una muy buena racha financiera por tener a los compradores en el valle de Río Bravo, con la facilidad para tener intercambios comerciales que ahora no tienen.
Ambas colindancias del Río Bravo y Texas se ayudaron uno con otro y seguramente muchas familias hicieron sus guardaditos en el tráfico de mercancías, pues lo mismo llevaban de un lado a otro del río desde un lápiz, hasta las vacas que se caían al río grande.
Es evidente que los rancheros de la zona fronteriza tenían un lenguaje que hasta ahora ya más o menos les empiezan a entender, porque la cruza de gringo con indio no dio lo que se esperaba, pero como quiera el inglés machacado se quedó por siempre con el “Spanglish” y ahora tiene diferentes revolturas dependiendo de la zona.
De los más de 630 mil habitantes que hoy tiene Reynosa, una de las ciudades más beneficiadas con esa relación comercial con Texas, más del 50 por ciento dejó su ombligo en otra entidad del país y como el deseo de vivir mejor emigraron a esa ciudad de ensueño que promete trabajo y bienestar sin cruzar el Río Bravo ni abandonar su México Lindo.
Reynosa se ha convertido en un nuevo escenario para amasar nuevas oportunidades de vida y mejorar las expectativas, con nuevas ilusiones porque cada día llegan nuevas industrias y se generan nuevos empleos, el único inconveniente son las balas que todo el tiempo circulan en uno y otro sentido de las calles de esta pujante ciudad.
El engranaje en esa ciudad fronteriza no termina de funcionar correctamente, en un año se generaron más de 14 mil empleos y hoy 11 mil de esas plazas están vacantes, nadie quiere ocuparlas y arriesgarse a vivir en una ciudad en donde igual pereces de una bala perdida camino al trabajo o sentado en la comodidad de tu casa.
Algo le está faltando al Estado y a la misma Sociedad Civil para que Reynosa avance a la par en el aspecto de inversiones, empleos y seguridad para las familias, no es posible que se siga importando la mano de obra porque los reynosenses prefieren huir a Monterrey o Texas y dejar las oportunidades a los chiapanecos u oaxaquenos que como no saben con certeza lo que les espera, abandonan su tierra por Reynosa.
ENTRETELONES
+++ Al prácticamente cumplirse la mitad de la campaña para la alcaldía victorense, OSCAR ALMARAZ SMER afirmó en entrevista que ha encontrado a su paso un gran respaldo para su proyecto.
+++ Juntos dimos pasos muy importantes en el último año, estabilizamos la ciudad, pero aún hay muchas cosas por hacer, Victoria necesita más infraestructura, seguir modernizando y devolverle la paz, afirmó ALMARAZ.