Familiares y colectivos víctimas son quienes hacen el trabajo, asegura la
Academia de Ciencia Forense.
Las procuradurías de Justicia en el país no han tenido capacidad para la búsqueda de los desaparecidos, por lo cual existe un rezago en ese problema, señaló Graciela Pérez, presidenta de la Academia de Ciencia Forense.
Apuntó que hoy existen más trabajos de búsqueda de parte de los propios familiares y los colectivos de familiares de las víctimas que de las propias autoridades del área de procuración de justicia.
Y añadió: “Seguimos buscando no solo yo, sino otros colectivos en otros estados y siguen encontrando miles de restos y cuerpos y personas, porque aunque sean como sean son personas y seguramente alguien las está buscando”.
Apuntó que familiares y colectivos han recogido restos óseos en diferentes zonas rurales, pero no se han hecho análisis, ni siquiera el antropológico porque la Procuraduría de que dispone de los equipos científicos se niega a recibir los restos.
“Nosotros excavamos, recogemos restos y tratamos de ordenarlos según se van encontrando, pero ello no es un trabajo científico que sirva para la identificación”, añadió.
Graciela Pérez insistió que en las fosas comunes ha sido depositada una gran cantidad de cuerpos a los cuales no se han tomado muestras de ADN, ni trabajos de identificación.
“A partir de ahí la muestra es clarísima y sabiendo como están las fosas comunes, todo lo que los compañeros han estado recuperando de los campos de exterminio, obviamente están rebasadas las procuradurías”, comentó.
