«LA PANDEMIA EN MÉXICO: POR ‘SIGNOS VITALES’. RESUMEN»

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Dr. Jorge A. Lera Mejía

Este lunes, me permito reproducir y compartir, el RESUMEN EJECUTIVO del reciente Reporte de 264 páginas, publicado por la Organización Nacional de la Sociedad Civil ‘Signos Vitales’. Este reporte aporta información de alta trascendencia y es una rigurosa recapitulación de los problemas sanitarios, económicos y de inseguridad que se presentan hoy día en nuestro país, a raíz de los efectos de la crisis económica iniciada en el año 2019 y agudizada por la pandemia del Coronavirus a partir de marzo de este año.

[…] El Reporte LA PANDEMIA EN MÉXICO, DIMENSIÓN DE LA TRAGEDIA, está compuesto por dos partes. La primera muestra un análisis de la gestión y los efectos de corto plazo de la pandemia de COVID-19 en México. La segunda, refiere a un diagnóstico de temas que, por su importancia, trascendencia y urgente necesidad de atención, los hemos denominado Alertas. 

La respuesta del gobierno mexicano ha sido la de restarle importancia a la pandemia de COVID-19. Esto trajo como consecuencia que ni el sistema de salud mexicano, ni la población, estuvieran preparadas para enfrentar esta enfermedad. La primera víctima de la tardía e ineficiente respuesta de las autoridades ha sido el personal sanitario. Al 16 de junio, la Secretaría de Salud (SS) informó que 32,388 de los 154,863 contagios eran de personal médico y sanitario (21%). Las defunciones de médicos y personal sanitario es 2.6% del total de muertes en México, más del doble que Brasil, el triple que Perú y cinco veces más que en China o el Reino Unido. 

La narrativa gubernamental ha estado caracterizada por mensajes contradictorios entre el presidente de la República y las autoridades de la Secretaría de Salud. El primero subestimando el peligro y consecuencias de la epidemia en México, y el segundo ofreciendo medidas de protección que no son atendidas, ni siquiera, por el mismo presidente. Las cifras de contagios y defunciones que ha presentado han sido cuestionadas y los pronósticos han sido subestimados y equivocados recurrentemente.

Muchas medidas sanitarias fueron improvisadas y estuvieron mal diseñadas, al no contar con un sustento presupuestal ni un marco legal adecuado, ni las estrategias necesarias para una coordinación efectiva entre autoridades federales y los gobiernos estatales. 

A lo largo de la pandemia, el gobierno asumió la falsa disyuntiva entre lo sanitario y lo económico. No se aplicaron medidas de distanciamiento social a tiempo ni de manera estricta, ni se evitó la proliferación de los contagios. Se consideró que atentaría en contra de la actividad económica. El gobierno se rehusó a otorgar ingresos a las personas para quedarse en casa.

Sin ese sustento para las familias era imposible que millones de personas pudieran observar distanciamiento social y continuaron saliendo.

Como consecuencia, el gobierno cayó en la trampa de lo económico vs. lo sanitario.

El escenario sanitario es lamentable. La estrategia del gobierno federal fue la de monitorear la pandemia a través de muestreo limitado y no representativo, y permitió el contagio de rebaño dado que la tasa de letalidad era muy baja. Sólo se han hecho 4.9 mil pruebas por millón de habitantes vs 110 a 140 mil en otros países semejantes. Por tanto, el número de casos quedó sub-reportado. También el número de fallecimientos está sub-registrado. Por ejemplo, en la Ciudad de México, los fallecimientos reportados de enero a mayo del 2020 sobrepasan por 14,868 (sólo 3,625 son reportados por muerte por COVID-19) a los registrados en esos mismos meses del promedio de 2016 a 2019. Aún así, las defunciones oficiales están aumentando rápidamente. México es hoy el quinto país en el mundo con más fallecimientos, más de 32 mil. Las proyecciones más optimistas calculan que habrá más de 70 mil muertos para fines de agosto. El número de casos y fallecimientos no cede. Aún así, la autoridad levantó el distanciamiento social.

En lo económico y social el panorama es igual de desolador. Se pronostica que el PIB caerá más de 8% en 2020 y tendrá una recuperación muy lenta. Se avizora una década perdida. El plan del gobierno para paliar la crisis económica y de empleo fue tímida, tardía e insuficiente.

Apoyos por menos del 1% del PIB, mientras otros países otorgaron apoyos de 5%, 10% 15% y hasta 30% del PIB.

Ante la falta de apoyo gubernamental, la ocupación y el empleo se han colapsado, sobre todo informales y de bajos salarios. En mayo dejaron de tener ingresos 12 millones de personas, 12.2 millones de miembros de la clase media caerán en pobreza, y para fines de 2020 habrá cerca de 95 millones de personas en pobreza, y más carencia alimentaria. Las mujeres y los niños son quienes cargan el mayor peso de la crisis. La violencia intrafamiliar se ha multiplicado, se ha agudizado la brecha digital y la pandemia está teniendo graves consecuencias en el aprendizaje a distancia de 80% de los niños y adolescentes. Por tanto, la pobreza y la desigualdad en México están empeorando todavía más desde abril y continuarán en los próximos meses y años.

La segunda parte del Reporte contiene las Alertas siguientes:

  1. Intento del poder presidencial discrecional para ejercer el presupuesto federal. 

2. Tensión entre el presidente y un grupo de gobernadores por el Pacto Fiscal. Los diez estados que más contribuyeron a la federación (87% del total), recibieron 54% de las participaciones y 42% de las aportaciones.

3. Estrategia de seguridad pública, basada en su militarización, con pocos resultados tangibles. En los primeros 16 meses del actual gobierno se han registrado 69 mil 554 homicidios, más del doble de los registrados durante los primeros 16 meses del gobierno de Enrique Peña Nieto cuando se reportaron 30 mil 85.

4. Agresiones desde el poder a periodistas y medios de comunicación, así como aumento de asesinatos de periodistas que amenazan la libertad de expresión. Artículo 19 contabilizó 609 agresiones contra periodistas en 2019.

5. Extinción de fideicomisos públicos para allegarse fondos de uso discrecional, sin intervención del Congreso, que incrementa incertidumbre por potencial incumplimiento de contratos y obligaciones.

6. Limitantes y sesgo electoral del “Censo de Bienestar”, usado para seleccionar a los beneficiarios de los programas sociales.

7. Educación. Insumos perdidos por la desaparición del INEE y la prueba PLANEA; pobre asignación presupuestal de 6% del PIB; abandono escolar en la EMS superará el 16% por aumento de pobreza; reducción presupuestal de 74% para capacitación de docentes, y ningún presupuesto para Inclusión Digital.
  2. Flujo migratorio proveniente de Centroamérica es una crisis humanitaria. Presión de Estados Unidos para implementar mecanismos de contención que reduzcan drásticamente el flujo y eviten que centroamericanos lleguen a la frontera norte modificó nuestra política migratoria, con implicaciones en derechos humanos y crisis social. Se desplegaron 10 mil elementos de la Guardia Nacional para patrullar la frontera sur y a 15 mil más para la frontera norte.
  3. El costo de apuntalar a PEMEX. El aumento de refinación de petrolíferos está generando externalidades negativas en materia ambiental y de salud. El uso de combustóleo por la CFE incrementó 43.4% la producción de partículas PM2.5, las más dañinas dado que penetran el sistema respiratorio, entre febrero y junio de 2020 en varias entidades federativas. La presencia de dichas partículas incrementa la tasa de mortalidad por COVID-19 en 8%.
  4. Crisis de empleo por la pandemia. Perfil de afectados: miembros de bajos ingresos del sector informal, asalariados de ingresos bajos, estados dependientes de turismo y otros servicios, empresas pequeñas y medianas.

Fuente: Resumen Ejecutivo del Reporte ‘La Pandemia en México: Dimensión de la Tragedia’. Publicado por la OSC ‘Signos Vitales: el Pulso de México’. PDF. Julio 2020.

* SIGNOS VITALES. Es una Organización de la Sociedad Civil (OSC), apartidista, sin fines de lucro, regida por un Consejo conformado por personas con una trayectoria destacada, con alto nivel ético y profesional, que cuentan con un reconocimiento nacional e internacional y con un firme compromiso por los principios democráticos y de libertad. El Consejo está conformado por un Comité Ejecutivo, un Comité Asesor de Especialistas y un Comité Asesor en Comunicación, y la operación de la organización está coordinada por la Dirección Ejecutiva.