Dr. Jorge A. Lera Mejía
El Sistema Nacional de Investigadores (SNI) fue creado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) a mediados de la década de 1980 con el principal objetivo de evitar el éxodo de científicos mexicanos a través de incentivos económicos que solventaran en parte la pérdida de poder adquisitivo generada por la crisis económica de la llamada “década perdida”.
Esta distinción simboliza la calidad y prestigio de las contribuciones científicas, en paralelo al nombramiento se otorgan estímulos económicos cuyo monto varía con el nivel asignado.
De acuerdo a las definiciones del Conacyt, el SNI tiene por objeto promover y fortalecer, a través de la evaluación, la calidad de la investigación científica y tecnológica, y la innovación que se produce en el país.
El Sistema contribuye a la formación y consolidación de investigadores con conocimientos científicos y tecnológicos del más alto nivel como un elemento fundamental para incrementar la cultura, productividad, competitividad y el bienestar social.
Entre evaluaciones por pares y periplos burocráticos, el SNI adquirió una fuerte institucionalización y legitimidad entre las ciencias mexicanas hasta el punto de considerarse un símbolo de prestigio individual y sinónimo de elite académica (Didou y Gérard, 2010).
La membresía al SNI representa un reconocimiento nacional a la dedicación de los académicos a las tareas de investigación en sus respectivas áreas de estudio.
Esta tarea debe estar reflejada en la producción de publicaciones científicas de calidad y la formación de recursos humanos de posgrado.
Para lograr esto, los académicos deben trabajar intensamente involucrando equipos de trabajo de varias disciplinas e instituciones nacionales y extranjeras, y establecer una cuidadosa planeación en el trabajo de campo, laboratorio y de difusión de resultados, además de la búsqueda de financiamiento.
Dado que dispone de recursos públicos, la investigación científica es una actividad permanentemente sometida a la rendición de cuentas.
La membresía al SNI forma parte crucial en la rendición de cuentas de investigadores y cuerpos académicos, ya que la pertenencia al SNI es un indicador de gran peso específico en los programas de licenciatura y posgrado de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT).
Pero lo más importante es que el trabajo de investigadores genera nuevos conocimientos que permiten coadyuvar al manejo y conservación de los recursos naturales, el desarrollo de las materias de ingenierías y ciencias exactas, así como para impulsar los trabajos de investigación sobre las ciencias sociales y de las conductas humanas.
La investigación científica en universidades públicas sirve además como semillero de talentos a nivel de licenciatura y posgrado para producir futuros investigadores que acrecienten la vocación científica en México por la búsqueda del conocimiento científico que permita un desarrollo sustentable.
A la par de impulsar estas labores de investigación y desarrollo de nuevas iniciativas de las ciencias y las técnicas, los investigadores científicos de la UAT que pertenecen al SNI, cumplen con otras actividades académicas, como servir a la formación de recursos humanos entre los estudiantes universitarios, impartir asesorías, organizar e implementar congresos y foros científicos, dirigir tesis de licenciaturas y posgrado, apoyar con tutorías donde se privilegie impulsar a otros a la necesidad de realizar investigaciones científicas.
La UAT, con el reconocimiento a todas esas labores, impulsa a sus investigadores con apoyos entre otros, para llevar a cabo acciones de movilidad de investigación, tanto con becas federales y locales que promueve prácticas en otras instituciones del país, como del extranjero.
Para las labores de publicación de artículos científicos, capítulos de libros, libros de un solo autor o en coordinación, la UAT también incide a través del Consejo de Publicaciones, en la promoción de investigaciones que se vean reflejadas en poder ser publicadas en libros y revistas indexadas y arbitradas, que son reconocidas por el Conacyt de seriedad u prestigio.
Para ello, la UAT difunde el padrón nacional e Internacional de revistas con visto bueno del Conacyt, así con base de datos como JCR, Scopus, Redalyc, Research Gates, entre otras bases de datos.
Por último, la UAT apoya a sus profesores investigadores que pertenecen en algunos de los grados SNI, como son del Nivel Candidato, Nivel I, II y III, hasta nivel de Inédito.
Para todos esos grados, la UAT reconoce y apoya para que sus investigadores sigan impartiendo clases de nivel licenciatura y posgrado, descargando horario menor para los profesores de tiempo completo con reconocimiento SNI.