Dr. Jorge A. Lera Mejía
Ante el más reciente conflicto avivado por la postura de oídos sordos del gobierno federal, contra los gobernadores aliancistas, que piden diálogo para discutir el presupuesto y la actual fórmula de reparto fiscal de la Ley de Coordinación con los estados. Ahora observamos que otro grupo de gobernadores, encabezados por los electos por el partido en el poder y sus aliados, defienden esa falta de diálogo político.
Sin embargo, debemos reconocer entre ambos grupos, los aliancistas y los oficialistas, cuál es el nivel de imagen política y eficacia que se consideran por los estudios de opinión pública.
Primeramente, trasciende que los 10 estados que conforman la Alianza Federalista aportan 50% del PIB Nacional y un 28.2% del padrón electoral
Además, ayer se comentó que la Alianza Federalista ya se compone por 14 estados por lo que se le suman 4 más, esto es, más fuerza que se nota en sus aportaciones al PIB y al electorado a nivel nacional.
En las últimas horas, cuatro gobernadores más se unieron al reclamo de los aliancistas, los cuales fueron: Carlos Joaquín González, de Quintana Roo; Carlos Mendoza Davis, de Baja California Sur; Francisco Domínguez Servien, de Querétaro, y Mauricio Vila, de Yucatán.
Es importante señalar, a la par de la importancia económica que los estados aliancistas representan, además son los estados mejor calificados por las empresas de opinión pública. Quiere decir, lo que son las cosas, hoy los gobernadores mejor calificados son los del PRI, PAN y MC.
Por el otro lado, se ubican los gobernadores que son representantes del partido Morena, a saber los gobernadores de Baja California, Jaime Bonilla; Chiapas, Rutilio Escandón; Morelos, Cuauhtémoc Blanco; Puebla, Miguel Barbosa; Tabasco, Adán Augusto López, y Veracruz, Cuitláhuac García, así como la jefa de gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum, este grupo con sus excepciones, conforman al grupo que la mayoría de las casas encuestadoras califican como los más ineficaces y cuestionados.
De acuerdo a datos publicados por la Encuestadora Arias Consultores, ejemplos notables son los tres mandatarios Cuitláhuac García de Veracruz, Miguel Barbosa de Puebla y Cuauhtémoc Blanco de Morelos, dos de Morena y uno de sus aliados, donde sus gobiernos han tenido una trágica caída en la confianza de los ciudadanos y manejan márgenes de confiabilidad y respaldo, que tendría cualquier fuerza política marginal.
Cuitláhuac García ha perdido más que el respaldo, el respeto de los veracruzanos y la versión popular que circula es que dejará el gobierno a un sustituto cuando se cumplan más de dos años de su administración, evitando una elección extraordinaria.
Miguel Barbosa es calificado como el peor gobernador del país con un ínfimo 4.9%.
Cuauhtémoc Blanco es evidenciado por la delegación de su mandato a gente de su confianza, al nepotismo y los nulos resultados en materia de inseguridad.
Otro gobernador, Jaime Bonilla, tiene 21.3 de respaldo público en una caída que contrasta notablemente con las cifras de su triunfo electoral.
El conjunto de los gobernadores de Morena presentan la mayor caída en el respaldo de los ciudadanos, comparados con los del PRI y PAN; nadie abona certidumbre en sus entidades porque no hay resultados sobresalientes en su gestión.
Así las cosas en este nuevo capítulo de encuentros y desencuentros, donde el común denominador no es la conciliación, si no más bien, la división y polarización…
¡No me ayudes compadre!