Agencias.- Los tres testigos principales ofrecidos por Emilio Lozoya Austin, quienes pudieran acreditar que la aprobación de la reforma energética fue producto de una asociación delictuosa en que “todos delinquieron”, se resisten a colaborar con la FGR o no han sido localizados para rendir su declaración ministerial.
De acuerdo con fuentes judiciales, dos de esos tres testigos fueron ofrecidos por el exdirector de Pemex, para reforzar o comprobar la teoría en el sentido en que Enrique Peña Nieto, expresidente de México, y su secretario de Hacienda, Luis Videgaray, dispusieron de 84 millones de pesos para sobornar a legisladores del PRI y el PAN para que votaran a favor de la reforma energética y sus leyes secundarias.
Se trata de Francisco Olascoaga y Rodrigo Arteaga, excolaboradores de Lozoya y funcionarios de Pemex. Ellos promovieron juicios de amparo contra cualquier mandamiento judicial solicitado por la FGR. Además no fueron localizados por esta dependencia en los domicilios, teléfonos celulares y correos electrónicos que fueron aportados por Lozoya mediante diversos datos de prueba.
El tercer testigo en cuestión es Guillermo Gutiérrez Badillo, exsecretario particular del actual gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez Servién, cuya estrategia de defensa se mantiene en el más absoluto sigilo.
Su declaración ministerial sigue pendiente, a pesar de que junto a Rafael Caraveo Opengo, es uno de los exfuncionarios vinculados al PAN que fueron grabados mientras recibían dos maletas repletas de dinero en efectivo en una oficina alterna de Pemex.
En contraste con los anteriores, cuatro testigos han colaborado con la FGR a cambio de de beneficios procesales.
Uno es Rafael Caraveo, exsecretario Técnico de la Comisión de Administración del Senado y mano derecha del exsenador del PAN José Luis Lavalle.
Los otros tres fueron funcionarios de Pemex y colaboradores de Lozoya: Froylán García García, como su coordinador ejecutivo en la Dirección General, Norberto Gallado Vargas, como jefe de escoltas y Miguel Pérez Esquivel, como su chofer.
Según el Departamento Administrativo de Pemex, Francisco Olascoaga Rodríguez, se resiste a declarar en la causa penal para imputar el delito de cohecho y asociación delictuosa de EPN y Videgaray.
El testimonio todavía no obra en la carpeta de investigación.
Además, su defensa se presentó el 22 de septiembre en un juicio de amparo en contra de cualquier orden de aprehensión o mandamiento judicial de la FGR o un juez federal pueda girar en su contra.
Según Lozoya, Olascoaga Rodríguez participó de manera directa en las entregas de presuntos sobornos que Pemex dio a legisladores del PAN y PRI para la aprobación de la reforma energética.
El exfuncionario es el único que tendría en sus manos el video completo de dicha entrega y que fue recibido por Rafael Caraveo y Guillermo Gutiérrez, como se aprecia en la grabación.
