Agencias.-“Bien, pero no espectacular”, así fue como las redes sociales calificaron el show de medio tiempo del Super Bowl LV que ofreció The Weeknd este domingo. El cantante canadiense protagonizó un espectáculo de 15 minutos en el Estadio Raymond James de Tampa, Florida que dividió opiniones, sin invitados especiales y con poco más de una decena de bailarines y coristas, Abel Tesfaye cumplió pero no sorprendió… y no es su culpa. A pesar de las duras críticas, hubo quienes aplaudieron sus esfuerzos, pues el espectáculo iba a ser difícil este año para cualquier artista debido a las restricciones por la pandemia de COVID-19, y tras la participación en 2020 de Shakira y Jennifer Lopez.
El show inició minutos después de las 19:20 horas, The Weeknd apareció en un auto negro con la palabra ‘Bienvenidos’ en un letrero sobre un escenario que simulaba una ciudad a escala, tras caer un ángel del cielo, unas compuertas se abrieron en el escenario y el cantante apareció de nueva cuenta interpretando su primer tema de la noche, “Starboy”. Vistiendo su clásico saco rojo y guantes negros, Abel Tesfaye fue acompañado por coristas que mantenían la distancia social en lo que parecían pequeños edificios, la situación se complicó cuando la mezcla de sonido comenzó a fallar, muchos fans en casa se quejaron en redes sociales de problemas en el audio, por lo que tuvieron que subir el volumen al máximo mientras se preguntaban si era un problema de su televisión.
Con fanáticos limitados en el estadio, complicaciones para traer artistas invitados y la necesidad de mantener las cosas en su mayor parte controladas, iba a ser difícil hacer que el espectáculo se sintiera especial. The Weeknd continuó su presentación con “The Hills” y “Can’t Feel My Face”, el cantante inició un recorrido detrás del escenario en un laberinto lleno de luces mientras tomaba la cámara para grabarse, algunos fanáticos compararon esta acción con ‘The Joker’ en “The Dark Knight”. Un grupo de bailarines apareció de repente en una escena que cayó por un momento en la histeria, todos utilizaban sacos rojos y vendas en el rostro, un guiño a la crítica que hace el cantante en su último disco “After Hours”.
El intérprete continuó con su éxito “I Feel It Coming”, mientras en el escenario aparecía una proyección de una noche estrellada con una enorme luna, un montón de fuegos artificiales enmarcaron el momento y The Weeknd sonreía a la cámara. “Save Your Tears”, “Earned It” y “House of Ballons / Glass Table Girls”, condujeron al montaje final, y al único momento brillante de The Weeknd (de acuerdo con los expertos y las redes sociales), el canadiense corrió por todo el campo y, con todos sus bailarines, comenzó a bailar y a disfrutar del momento con su último éxito, «Blinding Lights». Atrás quedó la histeria del laberinto y los problemas de audio. Fue un final alegre y hasta emotivo, una gran canción sonando y un montón de gente bailando en un concierto después de casi 10 meses de restricciones. Es lo que todos queríamos, y aunque la mayoría calificó el concierto de “sencillo” y hasta «frío», parece ser que The Weeknd nos dio lo que la pandemia le permitió.
UNIÓN Y GLORIA A LOS ‘HÉROES DE LA SALUD’
Jazmine Sullivan y Eric Church dieron inicio al Super Bowl LV con una actuación increíble y unificadora del himno de Estados Unidos con una combinación de country y R&B. El Mejor Artista del Año de los Premios CMA 2020, y la nominada en 12 ocasiones al Premio Grammy, abrieron su dueto con versos en solitario, antes de unir sus poderosas voces. Church sorprendió en la guitarra, vistiendo una chaqueta púrpura brillante y jeans, mientras que Sullivan complementó su traje blanco deslumbrante con un tocado de diamantes.
Una vez que la pareja terminó, los fuegos artificiales iluminaron el estadio. La ganadora del Grammy, H.E.R. de 23 años, también cautivó a los fanáticos mientras cantaba «America the Beautiful». La cantante vistió una curiosa chaqueta y jeans a juego que combinaban la piel negra y la mezclilla, además su larga cabellera se robó las miradas de todos los asistentes en el Estadio Raymond James en Tampa, Florida.
Previo al kickoff del juego entre Kansas City Chiefs y los Tampa Bay Buccaneers, la poeta nacional juvenil, Amanda Gorman de 22 años, recitó el poema “El Coro de los Capitanes” dedicado a la educadora de Los Ángeles, Trimaine Davis, a la enfermera administradora de Florida, Suzie Dorner y James Martin, un veterano de la Marina que trabaja como voluntario en el Wounded Warrior Project y que ayudó a niños sin hogar durante la pandemia.
Uno de los momentos más emotivos de la noche, fue cuando la NFL reestrenó el video «Lift Every Voice and Sing” de Alicia Keys, el cual ya habíamos visto en septiembre al inicio de la temporada, pero el domingo fue la primera vez que muchos espectadores vieron la conmovedora interpretación a menudo conocida como el himno nacional afrodescendiente, un tema que ha sido esencial en la lucha del movimiento Black Lives Matter en el último año.
