Agencias.- El director de la Agencia Espacial Europea (ESA) definió el problema de la basura espacial como un reto urgente, en una conferencia internacional en la que varios expertos alertaron de los riesgos que plantean los desechos para satélites y naves espaciales
«La basura espacial es uno de los temas más urgentes en relación con nuestro futuro en el espacio» , dijo el nuevo director de la ESA, Josef Aschbacher, en la rueda de prensa previa a la VIII Conferencia Europea sobre Basura Espacial.
Según cálculos de la ESA actualmente hay en el espacio más de 26,000 objetos de los cuales solo 2,800 tienen alguna función mientras que el resto son desechos sin ninguna utilidad, muchos de ellos muy pequeños pero que, debido a la velocidad que desarrollan, pueden causar daños en satélites o naves espaciales.
«Hemos llegado a un punto en que necesitamos algún tipo de coordinación en el tráfico espacial», advirtió Rolf Densig, director de operaciones de la ESA.
«Voy a poner un ejemplo sencillo. Si usted tiene un aeropuerto en el que solo hay un avión que despega en la mañana y otro que aterriza en la tarde no necesita coordinación. Pero sí la necesita si el tráfico es permanente», agregó.
Actualmente el tráfico de satélites, que se utilizan cada vez en más campos que van desde las comunicaciones hasta la meteorología, es permanente y las órbitas que usan no son ilimitadas.
Los restos de viejos satélites fragmentados y otros desechos -resultado de colisiones o de explosiones por remanentes de energía- pueden representar un peligro por lo que tienen que buscarse soluciones a mediano y largo plazo.
Parte de la solución está en remover objetos inservibles del espacio -para lo que la ESA tiene una misión planificada para 2025- y eso es algo que no es fácil, como advirtió Luisa Innocenti, encargada del programa de la ESA de limpieza del espacio.
Eso es válido sobre todo para los objetos de pequeño diámetro, resultado de fragmentaciones de objetos ya fuera de uso.
Por ello Innocenti propone que los satélites del futuro tengan que ser diseñados de manera que se tenga en cuenta su necesidad de removerlos posteriormente.
«Remover objetos del espacio es difícil. Si preparamos los satélites del futuro para que puedan ser removidos haremos las cosas mas fáciles», dijo.
Ello podría contribuir a una reducción de la producción de desechos espaciales pero también parece claro que es necesaria la eliminación de algunos de los objetos que hoy están en el espacio.
«Lo que debemos hacer es remover los objetos más grandes de las órbitas más frecuentadas para evitar colisiones y evitar que surjan muchos objetos pequeños que sean una amenaza», dijo Innocenti.
La seguridad de los satélites y del tráfico espacial es una de las razones para combatir la aglomeración de desechos pero hay también otras razones.
Así, por ejemplo, el director de la Unión Internacional de Astrónomos (IAU), Thomas Schildknecht, abordó otro aspecto del problema que tiene que ver con el llamado «derecho a un cielo despejado».
«La vista de un cielo despejado es una herencia de la humanidad. Solo observándolo podemos ganar conocimientos sobre el origen del universo». dijo.
La conferencia se prolongará hasta el 23 de abril y en ella se presentarán resultados de investigaciones sobre la basura espacial así como propuestas tecnológicas para hacer frente al problema.
Según la ESA se trata del foro más grande del mundo sobre el tema en el que ingenieros y científicos pueden intercambiar experiencias para hacer frente a lo que se define como uno de los grandes retos aeroespaciales.
Al lado de propuestas para la eliminación de la basura estatal también hay sugerencias para ubicarla mejor ya que los objetos pequeños y menos perceptibles también representan un riesgo grande.
En 2019, la ESA amplió su programa de seguridad espacial, que trabaja para comprender mejor el entorno de los desechos, prevenir la creación de más desechos, reducir la cantidad en órbita y disminuir el impacto de las actividades espaciales en la Tierra.
Ese mismo año, el Comité de las Naciones Unidas sobre la Utilización del Espacio Ultraterrestre con Fines Pacíficos (COPUOS) adoptó las Directrices para la Sostenibilidad a Largo Plazo de las Actividades en el Espacio Ultraterrestre (Directrices LTS), que brindan orientación para ayudar a garantizar la seguridad y uso sostenible del espacio.