Agencias.- Durante los ataques y bombardeos israelís los miembros de una familia palestina fueron víctimas mortales, ya que 10 de ellos murieron y solo un bebé de algunos meses de nacido sobrevivió.
La escalada bélica en el sexto día de confrontaciones militares, terminó con la vida de ocho niños y dos mujeres, que pertenecen a la familia palestina Abu Hatab, tras el ataque con cohetes.
Medios locales, describen el ataque como una masacre porque afirman que la casa de las víctimas fue bombardeada sin previo aviso, por lo que no tuvieron tiempo de escapar.
Sin embargo, el ejército de Israel dijo que está revisando las informaciones sobre sus ataques. Además, dijeron que “los cuerpos de los diez miembros fueron retirados de los escombros después de que la vivienda, en el campo de refugiados de al Shati, al oeste de la ciudad de Gaza, fuera atacada por bombardeos”.
El Ministerio de Salud de palestina distribuyó la foto de un bebé de cinco meses, que es el único superviviente de la familia.
En la noche, fuentes médicas dijeron que otros cuatro palestinos, incluidos dos hermanos, murieron en ataques contra una mezquita en el norte de Gaza, y las demás víctimas fueron trasladadas al Hospital Indonesio de la Zona.
Por medio de un comunicado, Hazem Qasem, portavoz de Hamás, acusó al ejército israelí de cometer una “masacre” contra civiles en el campo de refugiados de Shati.
“Este crimen refleja la incapacidad de la ocupación para hacer frente a la resistencia armada en Gaza, Cisjordania y Jerusalén”, comentó Qassem.
Testigos aseguran que los ataques ocurren en las fronteras este y norte de la Franja de Gaza, apoyados por aviones de combate que disparan proyectiles contra los hogares y objetivos, que según Israel, pertenecen al movimiento Hamás y demás fracciones armadas.