¿Vaso medio lleno o medio vacío?

-Consulta popular polariza la opinión pública -Por un lado, distractor; por el otro, marketing -Al margen del resultado se fortalece la marca AMLO-Morena

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Por Mario Díaz
COMO era de esperarse, la consulta popular con tendencia a esclarecer decisiones tomadas por actores políticos del pasado trae a colación el clásico ejemplo del vaso medio lleno o medio vacío, o bien si se trata de un número seis o nueve, de acuerdo a la posición en que se observe.

Por un lado, quienes consideran que el ejercicio cívico del pasado domingo fue un rotundo fracaso y que solo se trató de un distractor y, por el otro, la corriente de opinión que cataloga como un éxito que el 7.1% del padrón electoral haya participado en la primera consulta pública constitucional.

Y, en efecto, si el porcentaje de votación se compara con el 40% requerido para la vinculación, la presencia en las urnas de los ciudadanos que poseen una credencial de elector, desde ese punto de vista, puede considerarse como un fracaso. Sin embargo, si se analiza detenidamente la movilización cívica organizada y calificada por el Instituto Nacional Electoral y, además, tomando en cuenta que regularmente el abstencionismo es el triunfador en procesos electorales, el resultado podría resultar no tan negativo, máxime que se trató de una consulta popular y no la tradicional competencia de candidatos y partidos políticos.

Es con base en lo anterior que les asiste la razón tanto al presidente de la república ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR y el ex candidato presidencial panista RICARDO ANAYA al externar sus respectivos puntos de vista. El Jefe del Ejecutivo Federal califica como un éxito rotundo la jornada cívica del pasado domingo, mientras que su rival ideológico considera como un fracaso la participación del 7.1 % de la lista nominal electoral.

Evidentemente, perspectivas que ejemplifican claramente el vaso medio lleno o medio vacío de acuerdo al cristal con que se observe, o bien si se trata del número 6 o 9, según la posición en que se coloque el observador.

Ahora que, desde un plano que pretende ser objetivo, una de las probables causas del ausentismo ciudadano tendría su origen en una interpretación justa, lógica y congruente: la justicia no se consulta, simplemente se aplica.

No se requiere de un ejercicio democrático y constitucional para castigar a funcionarios del pasado o del presente que hayan cometido cualquier ilícito en el desempeño de su responsabilidad como servidores públicos. Tampoco es necesario consultar al pueblo sabio para que el gobierno en turno decida integrar una comisión de la verdad que indague en algún tema específico con tintes de corrupción y, posteriormente, solicitar a la autoridad competente la integración de una carpeta de investigación.

Cierto es que el 7.1% de participación es un porcentaje muy bajo comparado con el 40% vinculatorio. No obstante, electoralmente es una buena jugada en el tablero de ajedrez del Movimiento de Regeneración Nacional que le permite estar en el ánimo ciudadano con la mira puesta en la revocación de mandato en marzo próximo y en las seis gubernaturas que estarán en juego en el proceso eleccionario de junio 2022.

Ahora que, si la consulta popular se suma a la lista de presuntos elementos distractores que permiten tender una cortina de humo a la problemática nacional, también representaría una buena jugada de la causa morenista.

Tal parece que la estrategia del gobierno de la Cuarta Transformación se circunscribe a mantener en activo la marca AMLO-Morena. Tan es así que el partido en el poder se dará a la tarea de integrar una comisión de la verdad que conlleve al enjuiciamiento de los ex presidentes neoliberales, sin importar el resultado de la pasada jornada cívica dominical.

De ser así, en sus respectivos momentos en la cúspide del poder en la nueva centuria, ni al PRI ni al PAN se les ocurrió utilizar el recurso del marketing político para mantener vivas sus respectivas marcas.

Ni hablar.

DESDE EL BALCÓN:
I.-Pues resulta que, en esta entidad ubicada en la esquina noreste del país, el senador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA anda desatado en busca de la candidatura de Morena a la gubernatura.
Solo RODOLFO GONZÁLEZ VALDERRAMA, director de Radio, Televisión y Cinematografía de la Secretaría de Gobernación, y el legislador en la Cámara Alta del Congreso de la Unión, al menos hasta el momento, son los más viables a obtener la estafeta que les permita competir por el relevo del gobernador FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA.

Y hasta la próxima.
mariodiaz27@prodigy.net.mx