Agencias.- Un estudio ha hecho los cálculos en el bolsillo de la industria de la desinformación, tratando de formular una posible solución para contrarrestar el fenómeno
Un nuevo estudio de NewsGuard y Comscore, e informado por La Repubblica, hace que las cuentas estén en los bolsillos de desinformadores profesionales. ¿El estimado? Los sitios que publican noticias falsas obtienen alrededor de 2.6 mil millones de dólares al año de la publicidad.
Al hacer coincidir los datos de tráfico y los ingresos publicitarios de 7500 sitios, todos monitoreados por Comscore, con el puntaje de confianza asignado por NewsGuard a los sitios de noticias, el estudio pudo llegar a una estimación de los ingresos publicitarios obtenidos por los sitios menos confiables, donde Se publican teorías de conspiración, noticias engañosas o engañosas.
Como resultado, al aislar la muestra de 7500 sitios monitoreados, aproximadamente el 1,68% del gasto total en publicidad se destinó a sitios que publican información errónea. A partir de aquí, el periodista Pier Luca Santoro subraya en Repubblica, una primera consideración: «la desinformación en la web es financiada inconscientemente incluso por los grandes anunciantes».
Esto no sucede a sabiendas, sino gracias a las herramientas para automatizar las impresiones de anuncios. Los anunciantes pagan a plataformas como Google AdSense para colocar sus anuncios en el mayor número posible de banners, persiguiendo a un determinado público objetivo.
Por tanto, puede suceder que estos anuncios también aparezcan en los banners de sitios inadecuados. Para los anunciantes esto es un problema, ya que el riesgo es que su marca esté asociada al contenido publicado por los sitios de desinformación.
Por lo general, los anunciantes tienen algunas herramientas de seguridad de marca que simplemente evitan que aparezcan anuncios en sitios para adultos o casinos en línea, por nombrar dos ejemplos. Pero los sistemas automáticos que se utilizan hoy en día hacen que sea mucho más difícil distinguir un sitio de noticias falso de un sitio de noticias de buena reputación.
Hay un segundo hecho que subrayar, escribe Repubblica: la desinformación no cuesta casi nada. No requiere el mantenimiento de un equipo editorial profesional, ni (generalmente) tarifas de gráficos o reembolsos para los reporteros en el sitio. Así, cada euro que va a un sitio de fake news también paga mucho más que un euro que va a los medios de confianza.
Sin embargo, una posible solución surge del estudio de NewsGuard y Comscore. Para combatir las fake news, debemos partir desde aquí, desde una mayor conciencia de marcas y empresas que deben pedir y exigir un mayor control a plataformas como Google.
En el pasado, ya hemos visto cómo las protestas de los anunciantes han provocado cambios importantes en realidades más circunscritas como YouTube y Twitch.
Por un lado, por lo tanto, debes pedir una lista negra de sitios poco confiables, por otro lado también puedes trabajar con el proceso inverso: crear una lista de medios confiables para ser recompensados con mayores inversiones publicitarias. Según el estudio, las marcas se beneficiarían de obtener CPM más bajos, mayor alcance y, sobre todo, una mayor tasa de clics por impresión.
