Agencias.- La Niña está de regreso… La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos anunció el jueves que el fenómeno climático conocido como ‘La Niña’ se desarrolla con anomalía de -0.6°C en la temperatura superficial del mar del Pacífico ecuatorial.
Según la NOAA, tras un periodo de relativo equilibrio atmosférico desde inicios de año, La Niña se intensificará durante las próximas semanas y no comenzará a debilitarse hasta la primavera de 2022.
Con base a la tendencia de enfriamiento, la intensidad que podría observarse sería en promedio moderada, aunque algunas soluciones de modelos indican anomalía inferior a -1.5°C catalogándose como fuerte y con el paso de las semanas el panorama será más certero.
De acuerdo con el comunicado, los expertos comenzaron a notar que el evento climático se aproximaba en el último mes, cuando detectaron varios factores que apuntaban a su desarrollo entre ellos:
Temperaturas de la superficie del mar por debajo del promedio en el Pacífico ecuatorial
Anomalías térmicas en la mayor parte del Océano Pacífico central y oriental
Anomalías en vientos del este en niveles bajos y en los vientos del oeste en los niveles superiores de la atmósfera.
Aunque generalmente los signos de su activación comienzan a detectarse en el verano boreal, ahora, como ocurrió en 2017, La Niña comenzó a manifestarse entrado el otoño.
La Niña y el vórtice polar
De igual forma, sobre el Altiplano y porciones montañosas se presenta escases de precipitaciones bajo esta fase fría del ENSO, aunque no se descartan lluvias eventuales, dominando días soleados con frío seco, resultando también en heladas importantes y eventuales bancos de niebla nocturnas a matutinas. Actualmente, el vórtice polar que aparece desde septiembre, está mostrando un comportamiento poco usual.
Desde finales del verano, los modelos daban potencial de que el vórtice estaría débil entre el otoño e inicio del invierno, situación que se interpreta como el fácil deslizamiento de aire polar-ártico hacia varios países del hemisferio norte; hasta el momento, esta situación se está cumpliendo, considerando algunos puntos importantes.
¿Qué es la Niña?
Para entender qué es La Niña es preciso explicar el fenómeno más general en el que se engloba: el llamado evento ENOS o El Niño-Oscilación del Sur.
El Niño es un patrón climático que causa un debilitamiento de los vientos alisios en el hemisferio sur del Pacífico.
Esos vientos, cuando son normales, arrastran las aguas superficiales desde las costas hacia el océano y esto provoca que las aguas frías de las profundidades surjan allí.
Esa agua fría es lo normal en la zona ecuatorial de la costa de Sudamérica.
Cuando esos vientos alisios se debilitan cesa ese proceso, al agua caliente se acumula y se produce un aumento de la superficie del mar en la costa de Perú y Ecuador, principalmente.
Ahora bien, cuando los alisios son muy fuertes y se refuerza la subida de esa agua fría en la zona ecuatorial y la temperatura del mar está por debajo de lo normal, comienza a manifestarse el fenómeno de La Niña, que viene a ser un patrón climático opuesto a las condiciones de El Niño.
Generalmente, entre las dos fases, ocurre un periodo llamado “zona neutra” (en la que nos encontrábamos hasta hace poco) en la que ninguno de los dos eventos están notablemente activos y las temperaturas están sobre el promedio.