Para los niños del Puente Negro el haber jugado un partido de fútbol en la canchita Enrique Borja» fue como jugar en el estadio Azteca.
Luego de buscar la manera de sacar de situaciones complicadas a este grupo de niños y niñas que viven en zonas conflictivas y barrios pobres, ahora su equipo ha logrado cosas importantes como la de jugar un partido oficial en uno de los mejores campos sintéticos de la capital tamaulipeca.
Cuando comenzaron a reunirse para practicar fútbol, sólo tenían un pequeño espacio a un lado del río y sin porterías, hoy a base de trabajo y actitud, han limpiado este lugar y poco a poco toma forma de cancha.
Posteriormente sus ganas de salir adelante los han colocado en un campo de verdad como el llamado «Enrique Borja» ubicado en la Unidad Deportiva «Adolfo Ruiz Cortines».
Ante de cumplir este sueño, fueron invitados para presenciar un entrenamiento del equipo de fútbol profesional Correcaminos donde saludaron y convivieron con los Jugadores.
Algunos dirían, «son pequeñas cosas pero para ellos es un gran logro y es cumplir un sueño.
