Agencias.- Rusia rechazó ayer los informes de la prensa estadounidense sobre un posible ataque militar a Ucrania, al acusar a Estados Unidos de intentar agravar la situación.
El diario The Washington Post publicó el viernes, con base en fuentes y documentos oficiales, que los servicios de inteligencia de Estados Unidos han determinado que Rusia planea una posible ofensiva militar contra Ucrania que podría comenzar a principios de 2022 y consideraría unos 175 mil efectivos, y los planes incluyen el traslado de 100 grupos tácticos de batallón, junto con blindados, artillería y equipamiento.
“Estados Unidos está llevando a cabo una operación especial para agravar la situación en Ucrania mientras transfiere la responsabilidad a Rusia”, señaló Maria Zakharova, vocera de la cancillería rusa, citada por el diario Kommersant, y destacó que “se basa en acciones de provocación cerca de las fronteras de Rusia acompañadas de retórica acusatoria”.
El ministro de Defensa ucranio, Oleksii Reznikov, estimó que las autoridades rusas han concentrado 94 mil 300 soldados cerca de las fronteras de Ucrania y podría preparar una ofensiva militar a gran escala a fines de enero.
Por su parte, Estados Unidos está preocupado por la situación en las fronteras de Rusia con Ucrania y está dispuesto a proporcionar a Kiev lo que necesita para defender su territorio soberano, declaró el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin.
Las tensiones se han disparado en las semanas recientes después de que Washington, además de las autoridades ucranias, advirtieron a Moscú de planear una presunta invasión ante el incremento de tropas en la zona limítrofe.
El Kremlin ha negado las acusaciones, mientras señala a Kiev y a la Organización del Tratado del Atlántico Norte de fabricar acusaciones sobre los presuntos planes de intromisión militar.
Moscú anexó a la federación rusa el territorio ucranio de Crimea en 2014 y desde entonces respalda una insurgencia independentista en el corazón industrial de Ucrania, la región oriental conocida como Donbas. El conflicto ha dejado más de 14 mil muertos.
Los presidentes de Rusia, Vladimir Putin, y el de Estados Unidos, Joe Biden, hablarán el martes por videollamada para tratar las tensiones militares sobre Ucrania, sus relaciones bilaterales y el cumplimiento de los acuerdos alcanzados en la cumbre de Ginebra, entre otros temas, confirmó el vocero del Kremlin, Dmitry Peskov, a la agencia Reuters.
La llamada tendrá lugar “por la tarde” de Moscú y su duración “la determinaran los presidentes”, detalló la agencia rusa Ria Novosti.
Jen Psaki, vocera de la Casa Blanca, agregó que Biden discutirá específicamente las preocupaciones de Estados Unidos sobre el aumento militar de Rusia en la frontera con Ucrania; además, reafirmará el apoyo de Washington a la soberanía y la integridad territorial de Kiev. Subrayó que los mandatarios discutirán una serie de temas de las relaciones bilaterales, incluida la “estabilidad estratégica, el ciberespacio y las cuestiones regionales”.
El líder demócrata afirmó el viernes que le será “muy, muy difícil” a Putin lanzar una operación militar en Ucrania, ya que prepara una serie de iniciativas para prevenir la agresión. Aunque no detalló qué medidas ejecutará, la Casa Blanca indicó que se tiene un rango de herramientas a disposición, como las sanciones económicas.