Agencias.- La culminación de un año de gloria en Fórmula 1 ha dejado más que una temporada llena de fiesta en cada uno de sus 22 circuitos desde los finales de marzo en su comienzo, nos demostró quien puede ser el “mejor compañero”: Sergio “Checo” Pérez.
Pérez fue el compañero “ideal” para Max Verstappen en la escudería Red Bull, quienes le pidieron al tapatío que impulsara al holandés en las últimas pistas y así lo hizo, ese era su objetivo “ayudar a Max a ganar el campeonato” a palabras del piloto mexicano.
Cuando los ingenieros de Red Bull le pedían la Qualy para Verstappen, no protestó. Aunado a que conducía un monoplaza adaptado a su compañero de escudería, sin embargo, logró domesticar al ‘toro’ y obtener cinco podios en la temporada 2021, incluida su victoria en Azerbaiyán.
El circuito de Yas Marino fue la prueba exacta de que Checo Pérez tiene el respeto de su constructora, como de Mad Max; “le tengo que dar crédito a Checo, hizo un gran trabajo, una buena defensa, un gran trabajo en equipo”.
La carrera final, un circuito llenó de euforia y dos grandes pilotos se disputaban el campeonato que solo el respiro los separaba: Lewis Hamilton de Mercedes y Max Verstappen de Red Bull.
Fue una pista dura para el de Países Bajos, el de México logro posicionarse de cuarto hasta la tercera posición, no siendo buenas noticias para Verstappen que perdió lugar con Hamilton; en la vuelta 13 los rivales entraron a boxes, pero Max salió con retraso, lo que permitió a Checo Pérez liderar y continuar con el plan: hacer más lento al de Mercedes. “¿No es un manejo agresivo?” se escuchaba en la radio del piloto de Reino Unido, mientras que Pérez sacaba el colmillo en un juego limpio que acortó la diferencia a ocho segundo entre el 1-2; “Checo es una leyenda” recalcó Max.
A cinco vueltas de concluir el piloto de Williams, Nicholas Latifi, perdió el control y provocó un virtual safety car, sin embargo, abría la posibilidad del oro para Max con un cambio de neumáticos y esperar a atacar, mismo que ocurrió en la cardiaca última vuelta. Red Bull adelantaba a Mercedes en un épico final de temporada.
El sacrificio de tan grande alegría: sacar a Checo Pérez de la carrera con el motivo de que el coche no estaba bien pese a que marchaba en tercera posición, “el motor estaba a punto de tronar, tuvimos que retirar el auto” explicó el mexicano.
Sergio “Checo” Pérez, Chequito, el ‘viejo sabroso’, se enfrentó a circuitos que lo llevaron a los extremos: Baréin su coche dejó de funcionar en la vuelta de formación, Emilia Romaña de segundo a onceavo, Reino Unido una mala maniobra lo bajó a decimosexto, Hungría y Bélgica la lluvia lo lanzó al decimonoveno, Italia como castigo fue recorrido gasta el quinto cuando había terminado en tercero, así como en Estados Unidos logró el podio deshidratado y enfermo, sin olvidar el choque trasero en Arabia Saudita.
Sin embargo, llevó a su escudería a ascender al podio en Azerbaiyán, tres podios seguidos y consagrarse en México siendo el primer mexicano en ganar el podium en casa.
En su primer año con Red Bull, Checo les dio el cuarto lugar en el Mundial de Pilotos detrás de Verstappen, Hamilton y Bottas. Cumpliendo su cometido: ayudar a Max a ganar el campeonato.
