Para atender los graves problemas de seguridad y violencia que privan en el país es necesario contar con cuerpos de policía con atribuciones y capacidades de investigación y apoyados en una auténtica política de prevención del delito, además con una vinculación ciudadana.
Los despliegues militares no han dado resultados debido a que no es su vocación, y no están ahí sus fortalezas. Además de que únicamente han incrementado la violencia.
La organización no gubernamental “Causa Común” en un documento publicado en su página en internet señaló que la reducción del presupuesto federal para fortalecimiento de las corporaciones policiacas es muestra del abandono del gobierno hacia estas.
Desde el inicio del gobierno de López Obrador, diversos fideicomisos en materia de seguridad como el FASP, el FORTAMUN y el FORTASEG se han reducido año con año, o han registrado incrementos marginales que no permiten fortalecer las capacidades de las policías locales.
Además para el próximo ejercicio fiscal en 2022, se mantiene al FASP en términos reales, mientras que el FORTAMUN se reduce en un 4.6%. El FORTASEG no aparece etiquetado en el proyecto de presupuesto.
Con ello, el proyecto de Presupuesto 2021 confirma la apuesta del Gobierno Federal por la militarización del país, al incrementar a la secretaría de la Defensa Nacional y a la secretaría de Marina en porcentajes nunca antes tenidos en tanto que en otros rubros prioritarios los recursos se reducen.
La organización no gubernamental advierte que en lo político, se están alterando los equilibrios entre las esferas civil y militar, lo cual resulta preocupante a la luz de otras circunstancias que hoy debilitan a la democracia.
Recalca que para la Federación la prioridad es atender las prioridades de las corporaciones militares, cualquiera que sea su denominación, y colocarlas en tareas claves dentro del ámbito civil. No hay interés, que se refleje política o presupuestalmente por rescatar a las policías locales, puntualizó.