Por Mario Díaz
H. Matamoros, Tamaulipas.-Dígase lo que se diga, la realidad es que en la tragedia ocurrida la semana pasada en un centro migratorio de ciudad Juárez, Chihuahua, que dejó como saldo 39 migrantes fallecidos y 29 heridos, mucha responsabilidad tienen los gobiernos de México y de los Estados Unidos.
El gobierno de la Cuarta Transformación por aceptar esa política ventajosa extranjera que prácticamente obliga a que la frontera norte mexicana sea la “sala de espera” para los solicitantes de asilo en la Unión Americana tal y como lo señala el Título 42 expedido durante la administración de DONALD TRUMP.
El tío Sam por amagar con aranceles nada favorables para la economía azteca y sin invertir ni un solo dólar para la “sala de espera” de migrantes en México y, además, forzar a la 4T a desplegar miles de elementos de la Guardia Nacional en la frontera sur mexicana para formar un muro de contención para ciudadanos del centro y Sudamérica.
Lo ocurrido en ciudad Juárez es consecuencia de la política migratoria del país de las barras y las estrellas y, por supuesto, el consentimiento al pie de la letra del Ejecutivo federal en la República Mexicana, lo que ha generado seria problemática en los estados y municipios fronterizos con la potencia mundial del norte.
Los videos difundidos y que muestran la terrible realidad de lo ocurrido en ese llamado pomposamente “centro migratorio” juarense convertido en un recinto carcelario, evidencia la diferencia entre un albergue y una cárcel.
El presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR debería exigir a su homólogo JOE BIDEN que ambos gobiernos compartan los gastos necesarios para la instalación de albergues que permitan a los solicitantes de asilo llevar en mejores condiciones la espera del ansiado asilo.
Obviamente, los responsables directos de la custodia de los 39 migrantes fallecidos al no permitir el desalojo durante el incendio de colchonetas, habrán de responder por la negligencia que provocó la masacre.
Para mala fortuna del gobierno de la Cuarta Transformación ni la política migratoria mexicana bajo la presión estadounidense ni el programa abrazos, no balazos, han arrojado resultados positivos y, por el contrario, dejan muy mal a la 4T ante la opinión internacional.
Pero la tragedia ocurrida en ciudad Juárez, Chihuahua, no tan solo pone en entredicho la actuación de los gobiernos de México y los Estados Unidos; el siniestro también ha cimbrado el proceso de selección interna de los candidatos morenistas en la elección presidencial de 2024.
Al margen de argumentos y de responsabilidades directas, se antoja hartamente difícil que el secretario de Gobernación ADÁN AUGUSTO LÓPEZ y el canciller MARCELO EBRARD logren recuperar la imagen perdida como consecuencia de los trágicos hechos en aquella ciudad norteña.
Ambos, ADÁN y MARCELO, quieran o no, están asociados a la tragedia migratoria como consecuencia de sus respectivas responsabilidades oficiales en la Secretaría de Gobernación y en la Secretaría de Relaciones Exteriores.
De acuerdo al organigrama del gobierno federal el Instituto Nacional de Migración (INM) depende directamente de la SEGOB, pero, al mismo tiempo, el tema migratorio es parte de la responsabilidad de la SRE.
En contraparte y como consecuencia de lo antes descrito, CLAUDIA SHEINBAUM, jefa del gobierno capitalino y aspirante morenista al relevo del presidente LÓPEZ OBRADOR, tiene ante sí un horizonte político bastante halagüeño.
El huésped de Palacio Nacional, quien no oculta su preferencia por la Jefa de Gobierno de la CDMX, observa con atención a sus “corcholatas” y el escenario que, sin duda, afectará a dos de ellas.
La desgracia que enfrentan las decenas de familias centro y sudamericanas por los trágicos acontecimientos podría ser la punta de lanza para que el gobierno yanqui flexibilice su política migratoria derivada del Título 42 y, de igual forma, el gobierno mexicano exija mejores condiciones para continuar siendo la “sala de espera” de la oficina de Migración de los Estados Unidos.
DESDE EL BALCÓN:
I.-Aunque la hebra siempre se revienta por lo más delgado, no tan solo los custodios del centro carcelario habilitado como migratorio deberían ser juzgados y sentenciados.
También el director del INM en ciudad Juárez es responsable de la tragedia al ordenar a sus subalternos que no abrieran la puerta del reclusorio, con los resultados ya conocidos.
II.-Un triunfo más se anota la Asociación Nacional de Locutores de México (ANLM) que preside la Doctora Honoris Causa ROSALÍA BUAÚN SÁNCHEZ, organización gremial que otorgará su máxima presea Micrófono de Oro al presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.
El jefe del Ejecutivo federal aceptó la invitación formal y personal que le hiciera la dirigente nacional de la ANLM durante la conferencia del pasado fin de semana.
¡Enhorabuena”
Y hasta la próxima.
mariodiaz27@prodigy.net.mx