Quienes menos respetan los cajones de estacionamiento destinados a personas con discapacidad tanto en la vía pública como en tiendas departamentales o centros comerciales son los adultos de 40 años en adelante , reveló el Director del Sistema Municipal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) César Saavedra Terán.
“Tenemos un poquito más de problema y de resistencia con gente mayor de 40 años, que es donde tenemos más el tema de la falta de este tipo de respeto, definitivamente no todo el mundo tiene la cultura del respeto a los espacios para personas con discapacidad”.
Y agregó; “no lo vemos solamente en la vía publica sino también al interior de los estacionamientos de algunos comercios”.
El Director del Sistema Municipal para el Desarrollo Integral de la Familia lamentó que la falta de respeto por parte de algunos conductores hacia este tipo de espacios.
“Tenemos gente que llega y se estaciona sin ninguna clase de remordimiento”
Caso contrario, dijo, es que quienes más respeto tienen hacia las personas con capacidades diferentes son los conductores jóvenes.
“Mientras más joven es una persona, más respeto tiene por este tipo de espacios”.
Saavedra Terán señaló que una de las quejas recurrentes que reciben por parte de las personas con discapacidad es la falta de apoyo por parte del resto de la sociedad, para poder respetar los espacios que están diseñados para ellos.
“Hacer el llamado, tenemos que ser respetuosos todos, tenemos que entender que estas personas tienen viven una situación diferente a la del resto de la sociedad, ellos son prioridad, son grupos vulnerables”, recalcó.
Además, sobre el mal uso de los espacios de uso exclusivo para personas con discapacidad, el Director del DIF Municipal refirió algunos casos de personas con discapacidad que fallecieron, pero que sus familiares aún siguen empleando el tarjetón, “haciendo mal uso del tarjetón o de las placas”, incurriendo, dijo, en una ilegalidad.
Para evitar ese tipo de situaciones, señaló, ahora cada año se debe tramitar el permiso para tener acceso a los cajones para este tipo de personas y no como antes, que cada tres años se renovaba.
