Por Carlos López Arriaga
Cd. Victoria, Tam.- ¿Nuevo partido para EBRARD?, ¿o tan solo un proyecto de colaboración opositora?… La idea no es reciente en su milpa. De hecho ha sido una preocupación recurrente en las últimas cuatro coyunturas sucesorias.
Desde principios de siglo la manejó con insistencia quien fuera su jefe y mentor, el desaparecido MANUEL CAMACHO SOLÍS, inspirado entonces en aquel exitoso frente amplio que formó PEPE MUJICA en Uruguay.
Hay todavía ambigüedad en sus planes, entre la opción de plantear acuerdos con varias organizaciones o bien fundar un proyecto propio desde cero. Muy cuesta arriba, por cierto.
Pero bueno, si se aterriza su idea de un presunto Movimiento Progresista, la excorcholata obradorista estaría fundando una tercera entidad con ese nombre: “Movimiento”, aunque distinto apellido.
Ya existen dos, el guinda (Regeneración Nacional) y el naranja (Ciudadano). Entonces habría tres, de fraguar la idea de EBRARD (Progresista), coincidencia reveladora.
Dicho por académicos, el movimientismo precede a la creación de los partidos formales. Corresponde a una etapa adolescente en la construcción de proyectos políticos y gira en torno a un caudillo, un personaje carismático.
Que tres organismos en México puedan llevar ese nombre hace pensar que nuestras instituciones aún no dan el paso definitivo hacia la madurez plena.
Detalle curioso. Los membretes que llevan el nombre de “partidos” (PRI, PAN, PRD) andan ahora a la baja, se observan en decadencia.
Y los que aún se proclaman como movimientos, siguen ligados a sus padres fundadores. Parafraseando al españolito de MACHADO, nos movemos todavía entre un México que muere y otro que aún bosteza.
De ahí las dudas que a menudo encontramos: ¿sobrevivirá el MC al retiro de DANTE?… Pregunta que también atañe a MORENA. El desafío formidable de conservar la unidad orgánica cuando pase a retiro su fundador, líder moral, destapador en jefe y fiel de la balanza, AMLO.
TRASPASO EN MARCHA
Ya le entregó el bastón de mando a SHEINBAUM. Faltaría comprobar que también el poder completo, si CLAUDIA gana la elección del próximo junio y ANDRÉS cumple su promesa de retirarse de la política y mudarse a su refugio de Palenque, Chiapas.
Desde la trinchera morenista se reporta que la abanderada ya se lanzó al abordaje y está adoptando decisiones con gran rapidez para consolidar equipo propio y un mando firme de su campaña.
La doctora cuenta ya con una red nacional de apoyos regionales. Los gobernadores morenistas cerraron filas con ella desde la víspera y en dicho acuerdo no caben ya otras opciones.
Puede usted jurarlo, a donde quiera que vaya EBRARD se topará con MORENA. Trinchera que, para fines prácticos, ha dejado de acogerlo entre los suyos. Los medios lo reciben como una curiosidad periodística; para la militancia es un visitante incómodo.
Se descarta, incluso, un acuerdo con la otra figura discrepante del obradorismo que fue RICARDO MONREAL. El zacatecano se disciplinó, al igual que ADÁN AUGUSTO, NOROÑA y VELASCO.
La impresión es que CLAUDIA se está tomando muy en serio aquel consejo norteamericano de mantenerse siempre en movimiento (“keep on trucking”). Algo así como jamás detenerse, continuar, persistir en la tarea, por encima de cualquier circunstancia, buena o mala.
Este miércoles visitó la Cámara de Diputados para reunirse con las bancadas de MORENA y sus aliados del PVEM y PT. La flanquearon el coordinador de la fracción NACHO MIER y su brazo operativo ALEIDA ALAVEZ.
El tema no deja lugar a dudas sobre la prioridad del momento: unidad partidista. Operación cicatriz que no incluye a MARCELO. Pero sí a quienes podrían pensar en seguirlo.
Lo de ella es cerrar filas. Mismo propósito de su inminente gira por la república que arranca el domingo 17 de septiembre para realizar asambleas en las 31 capitales de los estados y la ciudad de México.
Recorrido cuya agenda enfatiza conceptos como sumar, construir acuerdos y “dejar atrás los recelos y los agravios entre simpatizantes y militantes.” (https://tinyurl.com/yvhlcg5l).
DIVERGENCIAS
Subsiste la preocupación por el efecto que aún podría causar la disidencia de MARCELO. Aunque justo es recordar que al excanciller se le conoce por su preparación y cultura. No por su arrastre.
Es hombre de trayectoria respetable pero sin impacto social. Demasiado técnico para que una eventual ruptura tuviese el efecto causado por CUAUHTÉMOC y PORFIRIO tras separarse del PRI en 1987.
Quizás porque rompió demasiado tarde (al igual que CAMACHO SOLÍS en 1993). En ambos casos, EBRARD y CAMACHO esperaron primero una decisión favorable a sus respectivos proyectos y tan solo se inconformaron hasta que el resultado les fue adverso.
La audacia de romper antes del destape fue lo que otorgó valor y legitimidad a la Corriente Democrática de CÁRDENAS, MUÑOZ LEDO y la doctora IFIGENIA MARTÍNEZ, con miras a la elección de 1988.
El principal cuestionamiento que la opinión pública le hizo años después a CAMACHO SOLIS es por qué esperó a que el dedazo le fuera desfavorable, tras el destape de LUIS DONALDO COLOSIO en noviembre de 1993.
En las llamadas “memorias apócrifas” de CAMACHO, aparece la transcripción de un telefonema con CARLOS SALINAS DE GORTARI, donde el entonces presidente le comenta:
-“Te preguntarás por qué LUIS DONALDO…”
A lo que CAMACHO SOLIS le habría respondido:
-“La pregunta es por qué no fui yo.”
Y aunque tiempo después, ya en su calidad de opositor, CAMACHO fustigó al dedazo, lo cierto es que venía de esa subcultura tricolor y habría aceptado de mil amores la imposición, de haberse resuelto en su beneficio.
Antecedente cercanísimo de lo que hoy ocurre con EBRARD.
BUZÓN: lopezarriagamx@gmail.com