Dr. Jorge A. Lera Mejía & Lic. Bárbara Lera Castellanos
Septiembre ha sido desde hace varios años, un mes en que ya es tradición ver crecer los flujos migratorios a través del territorio nacional.
Muchas hipótesis se han presentado para tratar de explicar o justificar este fenómeno, que como las migraciones de aves, tienen alguna relación con el mes y la temporada del año.
Fuera de semejanzas con las migraciones de aves, la migración humana realmente se relaciona por causas sociales, antropológicas, y más recientemente, por los fenómenos climáticos y desastres naturales.
Entre las causas antropológicas, tiene que ver con las condiciones humanas intrínsecas, que relacionan a la humanidad con las viejas tradiciones nómadas, desde los tiempos ancestrales.
Citando las razones socio económicas, la principal causa de las grandes migraciones de diásporas y grupos humanos, es debido a la pobreza y su binomio natural de las desigualdades presentes. Gracias a la falta de empleos decentes, formales y remunerados, los jefes y jefes de familias tienden a buscar en otros países, lo que su patria no les pueden brindar, para la subsistencia mínima requerida.
Otro factor social, más recientemente, se presenta por la violencia y presencia de criminales y pandillas que presionan a familias enteras a huir de esas conductas humanas antisociales. En este grupo causal, también se le añade las presiones políticas y religiosas, que provocan largas rencillas y buscar huir de las venganzas políticas, que incluyen problemas raciales.
Ante el cambio climático, que en el siglo XXI se ha presentado con más extremos, los fenómenos meteorológicos y desastres naturales por sismos, ciclones, erupciones, sifones, inundaciones e incendios, entre otros desastres, hemos presenciado grandes éxodos migratorios de poblaciones enteras.
SITUACIÓN ACTUAL MIGRANTE:
Estos fenómenos de éxodos y grandes fugas de diásporas migrantes, se presentan tanto en América como Europa. Ya es costumbre escuchar y mirar en los noticieros los éxodos desde Asia y África hacia Europa Occidental a través del mar Mediterráneo. Con las funestas noticias de pérdidas humanas por naufragios.
Al igual, desde Centroamérica, el Caribe y Sudamérica, cada vez es más frecuente observar grandes exodos y migraciones por medio de peligrosos territorios, como es el funesto cruce por la selva del Darien entre Colombia y Panamá.
Más adelante, es notorio escuchar los noticieros de los peligrosos trayectos a través del territorio mexicano, donde las rutas del Golfo y Pacífico, además del Centro, pululan las historias de accidentes por el Tren La Bestia o de La Muerte, los frecuentes hechos de secuestros y amenazas a migrantes por bandas criminales, y sin dejar de lado, las malas actitudes de las propias autoridades, sean de la Guardia Nacional, agentes locales y los propios agentes del Instituto Nacional de Migración (INM).
DESIGUALDAD Y CRIMINALES:
La migración y las remesas, pueden ayudar a reducir la situación de personas en pobreza, pero no reducir la desigualdad en sí misma. Es en los casos en que los inmigrantes retornados aprovechan la disparidad cambiaria que la mayor ventaja se produce, mientras las remesas en realidad sólo son paliativos de la pobreza.
Cuando la migración es muy significativa, la pérdida de población puede mermar el potencial productivo de las comunidades de origen, ya que su salida, temporal o definitiva, genera escasez de fuerza de trabajo en ciertos sectores o industrias específicas y, por ende, tiende a desincentivar el crecimiento económico.
La migración es el reflejo de la falta de oportunidades laborales, la desigualdad salarial y el acelerado crecimiento poblacional.
La migración es una práctica que ha estado presente en la historia de la humanidad; sin embargo, comenzó a verse como problema a partir de que ésta se dividió entre documentada e indocumentada. No obstante, las grandes ciudades, centros de producción y servicios, es decir lugares donde se requiere mano de obra que su población local es incapaz de cubrir, son las que atraen a los migrantes.
México, además de ser un país de origen migratorio, también se ha vuelto un territorio de retorno y de destino, pero sobre todo somos una nación de tránsito, ya que por nuestro país cruzan ciudadanos de más de 60 nacionalidades, en su mayoría centroamericanos, entran por la frontera sur constantemente. El estado mexicano ha mantenido su política de refugio, y aunque es muy bajo el número de personas a las que se ha abierto las puertas que otros países cierran, siempre es una opción.
NUEVA ECONOMÍA COLABORATIVA, UNA VÁLVULA DE ESCAPE DEL MIGRANTE:
El «New Sharing» o «Nueva Economía Colaborativa», se define como un modelo en el que los usuarios informáticos hacen uso de las nuevas tecnologías para prestar, comprar, vender, compartir o alquilar bienes y servicios. Cada vez es más común utilizar las aplicaciones que son más accesibles desde los simples smartphones, que son también más baratos y de dominio general de la población migrante.
De acuerdo con un análisis de Iebschool, antes de la pandemia en México ya existían alrededor de 450 empresas que se dedicaban a esta actividad del «new sharing», cada vez más con mayor crecimiento, concretamente en áreas como la vivienda, movilidad y crowdfunding.
Ahora se está buscando aplicar para agilizar la contratación de mano y mente de obra por medio de apps para dar trabajo inmediato a migrantes en actividades de servicios especializados.
Incluso el gobierno norteamericano, ya hizo genéricas las aplicaciones para los nuevos trámites de solicitudes de asilo humanitario migrante, desde este año 2023 es muy reconocida la aplicación CBP One, que promocionan para que los venezolanos, nicaragüenses, cubanos y haitianos hagan su petición desde fuera para evitar aglomeraciones y caer en el delito de cruzar de ilegal hacia territorio norteamericano.
Asimismo, el propio gobierno de México, está por lanzar una nueva aplicación inteligente, para agilizar el proceso de asilo en un momento en el que el número de solicitantes de asilo alcanza cifras récord ante la COMAR, incluso después de que una aplicación similar en Estados Unidos fuera objeto de duras críticas por sus fallos y dificultad de uso.
Andrés Ramírez, director de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), dijo a CNN que creía necesaria una aplicación para gestionar el abrumador número de solicitudes de asilo en Ciudad de México.
«Estamos recibiendo tanta gente que simplemente no damos abasto», dijo Ramírez, que por primera vez en la historia de su agencia, durante los primeros 18 días de mayo, se presentaron más solicitudes de asilo en la Ciudad de México que en la ciudad sureña mexicana de Tapachula, fronteriza con Guatemala.
Durante ese tiempo se presentaron 3.300 solicitudes en Ciudad de México y 3.000 en Tapachula, dijo Ramírez.
La nueva aplicación —denominada simplemente «sistema de prerregistro»— permitirá a las personas registrar en línea su intención de solicitar asilo y se espera que acelere la tramitación. Según Ramírez, está previsto que se ponga en marcha la semana que viene sólo en Ciudad de México y que más adelante se añadan otras zonas…
