La administración Biden anunció este miércoles que no acatará 26 leyes federales en el sur de Texas para construir el muro fronterizo, siendo la primera vez que la administración utiliza el poder ejecutivo empleado frecuentemente durante la presidencia Trump.
El Departamento de Seguridad Interna publicó el anuncio en el Registro Federal de Estados Unidos con pocos detalles sobre la construcción en el Condado Starr de Texas, que es parte de un transitado sector de la Patrulla Fronteriza con “altos ingresos de ilegales”.
De acuerdo con la información del gobierno, aproximadamente 245 mil entradas ilegales han sido registradas en esta región durante el actual año fiscal.
El Decreto de Aire Limpio, el Decreto de Agua Segura para Beber y el Decreto de Especies en Peligro de Extinción son algunas de las leyes federales que han sido eludidas para la construcción que utilizará fondos de una designación del Congreso en el 2019 para la construcción del muro fronterizo.
Esa medida evita revisiones que consumen tiempo y demandas que desafían la violación de leyes ambientales.
Los predios ganaderos situados en las colinas del Condado Starr, que se encuentra entre Zapata y McAllen, Texas, albergan unos 65 mil residentes que han poblado cerca de 1 mil 200 millas cuadradas, o sean 3 mil 108 kilómetros cuadrados, que forman parte del Refugio Nacional de Vida Silvestre del Valle Bajo del Río Grande.
Aunque ningún mapa fue mostrado durante el anuncio, un mapa anterior compartido durante reuniones de comentarios públicos muestra que la construcción agregará 20 millas a la barrera fronteriza existente.(Agencias)
