Lalo Gattás les prohíbe abrir la boca a sus “funcionarios”

2470
Tiempo aproximado de lectura: 1 minuto

Por José Gregorio Aguilar

Pese a que el equipo de prensa del Ayuntamiento se ha preocupado mucho en difundir una foto donde aparece el alcalde Eduardo Abraham Gattás Báez saludando al gobernador Américo Villarreal Anaya, con la intención, según ellos, de demostrar que todo está bien, que no hay problemas en la capital del Estado ni ingobernabilidad, la realidad demuestra que en Victoria no hay gobierno municipal.

Como se sabe, esta inédita situación se originó después de que el alcalde quiso imponer a algunos de los secretarios de Ayuntamiento sin consultar ni recibir la aprobación de los regidores del Cabildo, ignorando y violentando con su terquedad y capricho, al Código Municipal vigente.

De tal manera que algunos regidores como José Benítez y Alfredo Vanzzini del PRI y PAN respectivamente, reafirmaron que el gabinete de Gattás es ilegal y que hasta ahora no hay nombramientos válidos ni legales.

Es importante mencionar que Hugo Reséndez Silva sigue ofreciendo declaraciones como secretario del Ayuntamiento, lo cierto es que su nombramiento no ha sido validado por el Cabildo victorense.

Reséndez Silva es el único que responde a los medios de comunicación y en sus declaraciones asegura que Lalo Gattás está actuando en forma legal y que todos los funcionarios que integran su gabinete están legitimados y facultados para atender a los medios de comunicación, sin embargo, quienes cubren la fuente aseguran que los secretarios en cuestión no quieren dar declaraciones porque “no tenemos permitido”.

Antes, Gattás Báez prácticamente ignoró el 274 aniversario dela fundación de ciudad Victoria, organizando solamente algunas actividades cívico culturales a las que por cierto no se dignó a asistir además de que esos eventos tuvieron una pobre asistencia

Por ello la pregunta es, si Gattás está actuando con respeto al marco legal, porque no celebró la Sesión Solemne de Cabildo como oficialmente debió haber hecho y porque sus secretarios o funcionarios no quieren atender a los medios de comunicación’