Una cosa es clara: nunca tendremos el mejor sistema de salud del mundo como el de Dinamarca. Es más, ni Dinamarca tiene el mejor.
Eso del país nórdico solo fueron humo y espejitos que nos vendió el expresidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.
Basta con tener un sistema de salud decente, con doctores y enfermeras bien pagados, hospitales y clínicas medianamente equipadas, sin olvidar los malditos medicamentos que, desde el ya lejano 2018, nos siguen mintiendo en la cara diciendo que ya hay… pero nunca los hay.
Lo anterior viene a tema por los alarmantes datos que arrojó un informe de la OMS y UNICEF, que señalaron que tan solo el año pasado más de 341 mil niños no fueron vacunados en México y más de 100 mil no tienen el esquema completo de vacunación.
Podrían aparecer brotes o hasta epidemias de enfermedades graves como hepatitis B, DPT (difteria, tosferina y tétanos), polio, neumococo, rotavirus y la triple viral (sarampión, rubéola y paperas).
Probablemente será imposible alcanzar a esa generación de menores carentes de vacunas.
Será una bomba de tiempo que explotará en un futuro no muy lejano.
Parece que no fue suficiente la destrucción que provocó con el inhumano manejo de la pandemia contra el mortal COVID-19.
A esto se suman los medicamentos que ya tienen siete años en el “ya merito”, el bodrio que fue el INSABI, una burla para millones de mexicanos que se quedaron en el limbo sin atención médica, viéndose obligados a recurrir a las farmacias y consultorios similares que, curiosamente, muchas veces sí tienen los medicamentos que los hospitales no.
Sí, a nivel nacional tenemos un sistema de salud muy ineficaz.
Pasemos al tema del supuesto manoteo que se dio entre el secretario del Trabajo, GERARDO ILLOLDI REYES, y el todavía alcalde EDUARDO GATTÁS BÁEZ en el Polyforum de la capital, momentos antes de la ceremonia de honores a la bandera y teniendo, en primera fila y en calidad de réferi, al famoso “CALABAZO” HÉCTOR JOEL VILLEGAS GONZÁLEZ.
El chisme corrió como pólvora en las redes sociales, donde las llevó de perder LALITO GATTÁS, con burlas, señalamientos y mentadas de madre.
Minutos después, un encolerizado LALITO desplegó sus “medios” a favor y perfiles balines para inútilmente tratar de hacer contrafuego ante el escarnio público.
Por cierto, esos mismos “medios” le han dado hasta para llevar a GERARDO ILLOLDI.
Que si tiene la razón el funcionario estatal o la tiene GATTÁS, eso es lo de menos.
Lo importante es que le faltaron el respeto a la ceremonia y al gobernador: era su evento, su día, sus reflectores.
Fue un episodio vergonzoso más para el alcalde enfermo de poder, que provocará aún más división en Morena, mientras que en la ciudadanía hay más hartazgo que ni en los peores momentos con XICOTÉNCATL URESTI.
Fue tan evidente el malestar de muchos de los invitados a la conmemoración del Día de la Juventud que algunos secretarios del gabinete estatal y alcaldes asistentes prefirieron ya no pasar al otro salón del Polyforum, donde se sirvió el almuerzo en honor a los medallistas y deportistas destacados, y se retiraron tras atestiguar el mal rato provocado en la primera fila por GATTÁS, a quien, sin duda alguna, le afloró lo porro que siempre ha sido.
Incluso el staff más cercano al gobernador hizo esfuerzos por agilizar el evento posterior a los honores, pero la alegría de las y los jóvenes por convivir con AMÉRICO VILLARREAL, tomarse fotos, platicar con él y plantearle algunas peticiones hizo que aquello se prolongara más de lo esperado, mientras en las redes sociales el round GATTÁS–ILLOLDI era ya la comidilla del día.
Por los rumbos de Palacio de Gobierno quedó claro que esta fue la última vez que el alcalde victorense estará como invitado en algún evento donde también asista el jefe político del estado.
A propósito de AMÉRICO VILLARREAL, ayer se reunió en la capital del país nada menos que con el todopoderoso OMAR GARCÍA HARFUCH.
Ahora habrá que esperar las reacciones en el estado a tan trascendente encuentro, en donde seguramente uno de los temas tratados entre el gobernador y el secretario de Seguridad del gobierno federal fue lo acontecido hace unos días en Reynosa.
También, en temas gubernamentales, mucho cuidado deberían tener algunos secretarios de primer nivel a la hora de dar declaraciones a los medios.
Prueba de ello son RAÚL QUIROGA ÁLVAREZ, titular de Recursos Hidráulicos, y la contralora NORMA ANGÉLICA PEDRAZA, pues ambos se metieron en honduras sin que nadie los obligara y provocaron reacciones que nada favorecen a su jefe.
QUIROGA hasta fue desmentido por la propia CONAGUA por andar diciendo que en la frontera de Tamaulipas ya no había agua para surtir a las ciudades.
Mientras que la contralora armó tremendo lío con eso de que iban a desaparecer las compensaciones, un tema que podría prender la mecha en la burocracia estatal.
Así que ojalá las y los secretarios tengan más cuidado a la hora de responder a los reporteros.
Finalmente, pasemos al Alma Máter del estado, donde se llevó a cabo la firma del Contrato Colectivo de Trabajo 2025 entre la Universidad Autónoma de Tamaulipas y su sindicato de trabajadores (SUTUAT), con el que se da un paso firme hacia el fortalecimiento del diálogo, la corresponsabilidad institucional, el progreso y la estabilidad.
Y es que bajo el mando del rector de la UAT, DÁMASO ANAYA ALVARADO, y la voluntad de los representantes sindicales, se sigue fortaleciendo la relación entre ambas partes, misma que, sin duda, se verá reflejada en el corto plazo en el beneficio de la comunidad universitaria.
Por hoy sería todo, nos leemos mañana.
P.D. El altercado en el Polyforum debilita, aún más la estructura morenista y anima a un OSCAR ALMARAZ, quién nada de muertito, con bajo perfil y que anhela un tercer round en la capital tamaulipeca.
moc.liamg@zdhzaidrawna