Agencias.- La fiscalía de Minnesota elevó a asesinato en segundo grado la acusación contra Derek Chauvin, el exoficial que puso su rodilla sobre el cuello de George Floyd, y presentó cargos de complicidad e instigación contra los otros tres exagentes que estaban en la escena.
Según la legislación del estado de Minesota, el asesinato en tercer grado es aquel que causa la muerte de la persona de manera no intencionada a través de un acto eminentemente peligroso y puede acarrear una pena de cárcel de no más de 25 años.
En tanto, el asesinato en segundo grado es el que ocasiona el fallecimiento de alguien sin intención mientras se inflige o se intenta infligir un daños y puede ser penado con no más de 40 años de prisión.
Al hablar ante los medios, el fiscal aseguró que están investigando “lo más rápido posible”, pero admitió que un enjuiciamiento exitoso no podrá “enmendar el daño y la pérdida” causada.
Autopsias confirmaron que Floyd fue víctima de homicidio
Las dos autopsias realizadas a Floyd (la oficial y la independiente) han arrojado la misma conclusión: que su muerte fue un homicidio.
Difieren, sin embargo, en el motivo que ocasionó el homicidio. La autopsia ordenada por la familia apunta a una muerte por “asfixia”, mientras que la del forense del condado habla de un “paro cardiorrespiratorio” ocurrido mientras le inmovilizaban.
El asesinato de Floyd ha sido el detonante para una serie de manifestaciones en distintos puntos de Estados Unidos, donde unas 40 ciudades han declarado toque de queda nocturno para tratar de frenar los desórdenes y saqueos en los que derivado las protestas.