Asume Gobierno control de plantas tratadoras en la zona sur

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El Gobierno de Tamaulipas a través La Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de la Zona Sur tomo el control de las plantas tratadoras de aguas residuales “Tierra Negra” y “Morelos”que prestan sus servicios a la Refinería Francisco I. Madero, luego de que se detectaron una serie de irregularidades tanto en la contratos como en el proceso de tratamiento de las aguas no cumpliendo con la normatividad poniendo en riesgo la salud de la población y ocasionando problemas de contaminación ambiental.
Gilberto Estrella Hernández, secretario de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, reveló que la Auditoria Superior del Estado efectuó una investigación en la Comapa de la zona sur observándose irregularidades en los contratados Tierra Negra, PTAR Morelos y PTAR de osmosis inversa que presta servicios a la Refinería Madero, operadas por la empresa Desarrollos Hidráulicos de Tamaulipas, S.A. de C.V.
Desde hoy la COMAPA, tomó el control las instalaciones para que el organismo estatal opere directamente las plantas tratadoras de aguas residuales (PTAR), a fin de garantizar el servicio público y el derecho a la salud de la población tamaulipeca.
Entre otras cosas, se dio a conocer que en la Laguna del Chairel en donde descargan las agua residuales hay un alto porcentaje de coliformes fecales debido a que no se cumplen las normas de tratamiento de las aguas residuales por parte de las plantas con lo cual se ponen en riesgo la salud de la población y se contamina el medio ambiente, particularmente el agua.
En mayo del 2018 la Comapa había presentado ante la Auditoria Superior del Estado una denuncia por presuntos hechos ilícitos e irregularidades en la adjudicación, contratación y ejecución de obras, de servicios públicos, adquisición de bienes y otorgamiento de permisos, licencias y concesiones.
Además, irregularidades en el monto de inversión que se ha reflejado en las múltiples modificaciones al contrato lo cual repercutió negativamente en la contraprestación a cargo de la COMAPA, rebasando su capacidad de pago y poniendo en riesgo su operación, así como el posible desvío de recursos hacia fines distintos a los autorizados, y que pudieron haber causado y pudieran seguir causando daños y/o perjuicios al patrimonio de la COMAPA y, en última instancia, al del Estado de Tamaulipas.