Osorio habló de formaciones y del estilo con que su escuadra se parará en la eliminatoria, tanto de local como de visitante.
CIUDAD DE MÉXICO.
En el primer día de práctica de Juan Carlos Osorio, el colombiano ordenó que el equipo trabajara mucho en el reagrupamiento. Para el inicio de la eliminatoria ante El Salvador jugará con dos formaciones distintas, una de cuatro defensas y otra con cinco; de local dos delanteros y de visita uno, “por ser partidos totalmente diferentes, podremos ocupar todas las consideraciones que necesitamos”.
Los jugadores se tendrán que multiplicar para tapar espacios en el campo y asimilar lo más pronto posible los conceptos del colombiano que, de entrada, pugnará por tener elementos de un perfil natural de medio campo para abajo.
“Eso significa que Paul Aguilar y Miguel Layún competirán por el mismo sitio en la banda derecha, si alguien cree que desperdicio a alguno de ellos, su opinión es tan valedera como la mía”.
El estratega se sintió cómodo en su primer entrenamiento en el que, a su juicio, hubo fluidez y futbol de sus elementos, sobre todo de los que militan en Europa.
“Tenemos que considerar la forma con la que más nos identifiquemos para jugar. Por el buen momento de (Raúl) Jiménez, Chicharito (Hernández) y Oribe (Peralta), estamos pensando en jugar con dos atacantes casi siempre”.
Le hace algo de cosquilleo el debut, por tratarse de jugar como local en el Estadio Azteca y ante una escuadra salvadoreña disminuida. Lo que más le interesa es que el equipo tenga repliegue y salida.
“Hay quien dice que la obligación de México ante estos equipos es golear y no es así, la obligación es ganar. Al hablar con varios exfutbolistas de la selección me confirmaron que se menosprecia a los rivales de la zona”.