Diariamente llegan a la frontera de Tamaulipas cientos de migrantes por lo cual los albergues se encuentran saturados de nueva cuenta y con problemas para atender la demanda de alimentos.
Durante los últimos tres meses han llegado oleadas de migrantes de origen cubano, hatiano, así como hondureños, salvadoreños y guatemaltecos ante los cuales las casas de ayuda a migrantes “Nazareth” en Nuevo Laredo; “Senda de Vida” en Reynosa y “San Juan Diego” en Matamoros no están teniendo capacidad para atender la demanda.
Además, de que en cada de una de estas ciudades los migrantes han establecido campamentos en las inmediaciones de los puentes internacionales, quienes esperan conseguir asilo pues huyen de la violencia, desplazadas por el crimen, la pobreza y/o la falta de oportunidades laborales en sus lugares de origen.
El director de la Casa del Migrante “San Juan Diego”, Juan Antonio Sierra Vargas, comentó que tiene un flujo diario de 150 a 200 migrantes, adicional a la lista de espera.
Es así que se tienen problemas no únicamente para proporcionar albergue, sino también los alimentos diarios.
Además, hay migrantes con problemas de salud e incluso se han detectado casos de migrantes contagiados con coronavirus.
En ese sentido, comentó que algunos migrantes llegan con problemas de salud al tener que recorrer largas distancias dejan de tomar sus medicamentos para la diabetes, hipertensión y otras enfermedades.
Explicó que conforme los migrantes van ingresando con asilo a los Estados Unidos, van abriendo espacios para otros migrantes.
Para ingresar a la Casa “San Juan Diego” así como otros albergues se aplica a los migrantes una prueba COVID y una vez que está da negativo se les ingresa para canalizarlos con trabajo social, atención psicológica y se les brindan alimentos, kit de limpieza, atención médica, alimentos y un lugar donde dormir.
Por su parte, el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, hizo hincapié en que pese al incremento en la afluencia de migrantes a las ciudades fronterizas de Tamaulipas ni el Gobierno del Estado, ni los Ayuntamientos están recibiendo ayuda para prestar atención a los migrantes.
Añadió que el Gobierno del Estado y Ayuntamientos están destinando recursos para apoyar a las Casas de Migrantes, ante la nueva oleada de migrantes que se esta dando.
Apuntó que desde hace tres años advirtió sobre las implicaciones de mantener abierta la frontera sur pues traería serios problemas de seguridad, de violaciones a los derechos humanos y salud pública.
La Federación suspendió los apoyos para la atención a los migrantes y cada vez son más los migrantes que arriban por lo cual se ha multiplicado el problema.
“Es un movimiento terrible de migrantes por la cantidad de ellos y las condiciones en que se desplazan”, añadió e insistió en que siendo este un problema de competencia de la Federación nada se ha hecho por atenderles por respaldar a los Gobiernos locales que prestan asistencia.
Ante la gravedad del problema, recalcó que es necesario sumar trabajo, esfuerzos, recursos, pero es la Federación la cual se resiste ha colaborar en un problema que es de su responsabilidad.