Por Mario Díaz
BIEN sea por el “desastre fronterizo de Biden” o bien por la afrenta de un grupo delictivo que opera en esa zona y que disparó contra un helicóptero del Departamento de Seguridad Pública (DPS), lo cierto es que el gobernador de Texas, GREG ABBOTT, mantuvo por más tiempo la serie de “acciones agresivas” en el puente internacional Pharr-Reynosa, en el estado de Tamaulipas.
El operativo excesivo en la revisión del transporte de carga que cruza a los Estados Unidos se manifestó en cruces fronterizos entre México y Texas con el objetivo de prevenir el flujo de drogas, armas, inmigrantes ilegales, contrabando y traficantes de personas, de acuerdo al argumento oficial del gobernante texano.
Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas son las entidades fronterizas mexicanas que colindan con el estado con mayor extensión territorial en la Unión Americana. Tras pláticas y acuerdos con ABBOTT, la gobernadora de Chihuahua, MARU CAMPOS GALVÁN; el gobernador de Coahuila, MIGUEL ÁNGEL RIEQUELME SOLÍS; y el mandatario de Nuevo León, SAMUEL GARCÍA, lograron superar el conflicto comprometiéndose a reforzar la vigilancia en el territorio nacional.
Posteriormente, el diálogo se realizó entre el gobernador de Tamaulipas FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA y el gobernante texano GREG ABBOTT. En el cruce internacional Reynosa-Pharr que conecta a ciudad Reynosa y McAllen, en ambos lados de la frontera, continuaron por varias horas después las revisiones adicionales por parte de la autoridad seguridad pública de Texas, provocando retrasos de hasta 15 horas y pérdidas de productos perecederos.
Oficialmente, el gobernante republicano considerado como integrante del ala más conservadora de ese partido político, tomó esa decisión radical luego de que el presidente de los Estados Unidos JOE BIDEN anunció que en el mes de mayo concluirá el Capítulo 42 implementado por su antecesor DONALD TRUMP, que autoriza las deportaciones de inmediato por motivo de la pandemia. De acuerdo a la política migratoria de BIDEN, el Capítulo 42 es contrario a los tratados sobre derechos humanos migratorios internacionales.
Sin embargo, una corriente de opinión considera que, en el caso de Tamaulipas, el berrinche del republicano ABBOTT por la decisión del demócrata BIDEN, estuvo aderezado por la afrenta de un grupo delictivo que opera en ciudad Reynosa y que disparó contra un helicóptero del DSP que patrullaba la frontera en el mes de marzo. En esa ocasión, elementos militares mexicanos arrestaron a varias personas relacionadas con ese hecho de conflicto internacional.
Como es del dominio público, los empresarios transportistas locales decidieron cerrar el puente internacional Reynosa-Pharr en protesta por la rigurosa revisión. Como respuesta, delincuentes rociaron gasolina e incendiaron tres tráileres obligando a los camioneros a retirar el bloqueo del puente internacional.
De acuerdo a la Federación de Cámaras de Comercio en Tamaulipas, “las acciones agresivas” ordenadas por el gobernador de Texas provocaron pérdidas diarias por 75 millones de pesos y, además, afectó a alrededor de 25 mil exportaciones, principalmente de productos perecederos.
El flujo de transporte de carga a través de ese cruce internacional en la petrolera ciudad Reynosa disminuyó considerablemente, lo que obligó la intervención del mandatario tamaulipeco GARCÍA CABEZA DE VACA ante gobernante texano GREG ABBOTT. El acuerdo obliga a las autoridades tamaulipecas reforzar la vigilancia para evitar flujos migratorios ilegales, mientras que en Texas se dará fluidez al comercio internacional.
Lamentablemente, ante la falta de intervención por parte de la autoridad mexicana para mediar en el conflicto y que derivo en el plantón de camioneros en pleno puente internacional, los empresarios transportistas tuvieron que deponer su movimiento de protesta ante la amenaza del crimen organizado de incendiarles sus unidades de carga.
Lo que podría considerarse el saldo final del conflicto es que el gobernador de Texas logró llamar la atención del presidente BIDEN; los mandatarios de Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas coronaron con éxito sus gestiones, normalizándose el flujo y revisión vehicular.
DESDE EL BALCÓN:
I.-A juzgar por el aparente trato preferencial y de confianza hacia los gobernadores de Chihuahua, Coahuila y Nuevo León, podría pensarse que existe un conflicto entre el gobernador de Texas y el mandatario de Tamaulipas.
¿Será?
Y hasta la próxima.
mariodiaz27@prodigy.net.mx
