Verónica Patricia Reyes Martínez llego a su trabajo en la torre Bicentenario como cualquier otro día, alegre, sonriente y hasta con música como hace años como siempre así se quiso ir a despedirse de sus compañeros de la secretaría de Bienestar, 30 horas antes había muerto de cáncer.
Fue la voluntad de Verónica Patricia que fuera llevada a la torre Bicentenario durante más de 12 años de los 32 que presto sus servicios al Gobierno de Tamaulipas.
A bordo de una carroza fúnebre su cuerpo fue llevado a las afueras de la torre a donde sus amigos de la secretaría de Bienestar y de otras dependencias que la conocían salieron a despedirla soltando globos blancos.
A sus 51 años de edad Verónica Patricia era una mujer alegre, le gustaba la música así que unos metros de la carroza iba un vehículo con equipo de sonido poniendo sus canciones favoritas.
Fue recibida y despedida en medio de largos, cariñosos y calurosos aplausos de sus compañeros de trabajo.
Pero también hubo lágrimas, tristeza, dolor ante la voluntad de Verónica Patricia de querer decir adiós a sus amigos, amigas, los recuerdos.
Jorge Alberto, su hijo con lagrimas en los ojos agradeció las muestras de cariño hacia su madre y dio las gracias por haber sido sus amigos.
Verónica Patricia con una nueva larga salva de aplausos fue despedida con la música por dentro y por fuera que siempre llevaba.